El papa emérito Benedicto XVI falleció este sábado 31 de diciembre a la edad de 95 años en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano. Este hecho conmocionó el mundo, pues Joseph Ratzingerm marcó la historia de la Iglesia Católica al convertirse en el primer pontífice de la era moderna en renunciar a su cargo.
“Después de haber examinado ante Dios reiteradamente mi conciencia, he llegado a la certeza de que, por la edad avanzada, ya no tengo fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino”, fue lo que dijo Benedicto XVI minutos antes de renunciar.
Papa Beneducto XVI falleció a la edad de 95 años. Foto: VaticanNews
Sin embargo, su salud no fue la única razón que lo alejó del Vaticano. Los escándalos de abuso infantil acosaron a la mayor parte de su papado, aunque se le atribuye haber iniciado el proceso para disciplinar o expulsar a los sacerdotes después de una actitud más laxa bajo Juan Pablo II.
Por ejemplo, ordenó una investigación sobre los abusos en Irlanda, lo que condujo a la dimisión de varios obispos. Disciplinó al difunto padre Marcial Maciel, fundador de la orden católica de los Legionarios de Cristo y uno de los criminales más notorios de la Iglesia. El Vaticano, bajo el papado de Juan Pablo II, no tomó medidas contra Maciel, a pesar de la abrumadora evidencia de sus crímenes.
Según ACI Prensa, una agencia de noticias católica, cuando el entonces cardenal Joseph Ratzinger se estaba acercando a los 75 años, pidió varias veces al papa San Juan Pablo II un permiso para retirarse de su trabajo como prefecto de la Congregación para la Doctrina de Fe.
Benedicto XVI renunció en el 2013. Foto: vaticanNews
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El cardenal quería convertirse en bibliotecario o tomar algún otro trabajo que le diera más tiempo para escribir libros, sin embargo, el ‘Papa peregrino’ rechazó sus peticiones.