En “La entrevista”, Paola Ugaz conversó con Guillermo Galdós, corresponsal de Channel 4 de Reino Unido y que, además, formó parte de la búsqueda de Dom Phillips (57) y Bruno Pereira (41). Galdós contó cómo se encontraron las pertenencias del periodista británico y el indigenista brasilero, quienes llevan desaparecidos desde el 5 de junio.
- ¿Cómo ha sido este proceso de búsqueda tan triste a un colega Dom Phillips y al indigenista Bruno Pereira?
Nosotros nos enteramos de la desaparición de ellos el domingo pasado (5 de junio) y tomamos la decisión el miércoles de viajar al lugar. Tuvimos que volar a Colombia, de ahí volamos a Leticia, luego agarramos un bote que nos llevó a Atalaia do Norte (Brasil), tomamos una lancha rápida y nos fuimos a la zona donde Dom y Bruno habían desaparecido. Las organizaciones indígenas habían formado un equipo de rescate, que estaba formado por cuatro etnias diferentes con las cuales ambos habían trabajado en el pasado.
Lo que vimos era un puesto, cuatro barcos en el río, habían cortado un poco de monte para armar las hamacas y, desde ahí, salían las canoas todos los días a peinar la zona, que es de difícil acceso. Está el bosque todo inundado, es casi impenetrable. Cerca de Sao Gabriel, hay un par de lagos donde pudimos encontrar los restos, la ropa que tenía puesto Bruno cuando desapareció.
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- Entonces, el Estado peruano en esa zona es inexistente. Nadie ha hecho nada.
Es realmente una vergüenza porque esa base queda al frente del río Tacuarí, que es donde desapareció Dom y Bruno, desde esa base, se podía controlar la entrada y salida al Yavarí.
Nosotros sabemos, esa zona la hemos peinado antes, que cuando sigues bajando por el Yavarí hay varias comunidades ataucusi que hoy tienen miles de hectáreas de coca, sabemos que a los indígenas brasileros también los contratan para que vayan a trabajar en la cosecha de la coca, pero esta economía ilegal ha creado un gran problema en la zona y eso sumado a la falta de presencia del Estado. La falta de autoridad ha producido una cantidad de bandas delincuenciales que están al servicio del narcotráfico, pesca ilegal, tala ilegal, minería ilegal. Estos ríos se han convertido en carreteras del narcotráfico para entrar a Brasil.
Lamentablemente, lo que hemos visto es que un periodista británico ha sido asesinado y eso ha hecho que los medios internacionales le presten atención al tema porque en Brasil han matado a decenas de defensores de derechos de los indígenas. Desde el 2006, hay más de 140 muertes, pero todas pasaron desapercibidas. Tuvo que morir un periodista británico para que el mundo le preste atención a la zona.
- ¿Qué es lo que se cree que pasó con Dom Phillips y Bruno Pereira?
Dom y Bruno estuvieron en varias comunidades viendo el tema de la pesca ilegal, la cual está completamente ligada al narcotráfico porque, a través de la investigación que hemos hecho, nos dimos cuenta de que esta se usa para lavar el dinero del narcotráfico.
Ellos, aparentemente, se encontraron con un grupo de pescadores ilegales, tuvieron una discusión, pasó gente armada. Esta gente se mueve con un sistema de comunicación de radios. Cuando Dom y Bruno salieron de la comunidad en la que estaban camino a Atalaia do Norte, las organizaciones indígenas sabían que ellos tenían que llegar a las 8.00 a. m.. Ellos no llegaron y a las 10.00 a. m. el hijo de un muy conocido indigenista brasilero sale en búsqueda de ellos y no los encontró.
- ¿Qué tendría que hacer el Estado peruano en esta zona para retomar el orden, para que no se vuelva una carretera abierta al narcotráfico?
No es que si se vuelve, ya es una carretera abierta. Lo primero que tendría que hacer el ministro del Interior es apersonarse en la zona, ver la miseria en la que ha quedado la base de la Policía e instalar lo antes posible un puesto de control serio. Nosotros también escuchamos, de los policías que estaban en este puesto de control, es que ellos les quitaban la madera a la gente que no tenía papeles, que era una serie de coimas. La gente local no estaba contenta con la presencia de la Policía.
-¿Cuán difícil ha sido la búsqueda? ¿Qué trabajo hicieron?
Fueron tres días muy duros en ese campamento porque estábamos viviendo bajo condiciones muy complicadas. Para contextualizarlo, todas las noches se hacían disparos, se tiraban bengalas solamente para que no vengan los jaguares a atacarnos. No te podías bañar en el río porque estaba lleno de caimanes.
Los primeros días estaban achicando la zona de búsqueda hasta que en un momento alguien gritó: “Acá hay algo”. Cuando volteo con mi cámara, veo que sacan del agua la camisa de Bruno y estaba con una mancha muy grande de sangre. Al costado, uno de los motores se engancha con lo que parecía un pantalón y comienzan a salir cosas. El equipo de rescate está seguro que los cuerpos están en esa zona porque, por lo que me han dicho, la zona ya huele a descomposición de cuerpos. Ahora, los buzos están buscando los cuerpos de Dom y Bruno, pero hay que tener en cuenta que es muy difícil porque hay muchos animales silvestres y eso hace que sea más difícil encontrar restos.