Una delegación de funcionarios de Estados Unidos viajó el fin de semana a Venezuela para reunirse con el régimen de Nicolás Maduro y los asuntos vinculados a la energía estuvieron sobre la mesa, dijo el lunes la Casa Blanca.
“El propósito del viaje que realizaron los funcionarios de la administración fue discutir una variedad de temas que incluyen ciertamente energía y seguridad energética”, declaró a periodistas la portavoz del Gobierno de Joe Biden, Jen Psaki.
El sábado 5 de marzo, el New York Times informó sobre dicha reunión. En ese momento, los datos fueron revelados luego de consultar con personas familiarizadas con el tema.
Se trató de la visita de más alto nivel de funcionarios estadounidenses a Caracas en años, impulsada por el deseo de separar a Rusia de sus restantes aliados latinoamericanos.
Estados Unidos rompió las relaciones diplomáticas con Maduro y cerró su embajada en Caracas en 2019, después de acusar al líder chavista de fraude electoral.
Posteriormente, la administración de Donald Trump sancionó sus exportaciones de petróleo y a los altos funcionarios del país. Además, reconoció a Juan Guaidó, líder de la oposición, como presidente legítimo de la nación.
En ese sentido, el mandatario pidió ayuda económica y diplomática a Rusia, Irán y China para responder a las sanciones. Las empresas energéticas y los bancos rusos han sido fundamentales para que Venezuela pueda seguir exportando petróleo, la mayor fuente de divisas del país, a pesar de las sanciones.
“Ahora, la invasión rusa de Ucrania ha hecho que Estados Unidos preste más atención a los aliados del presidente Vladimir Putin en América Latina, que Washington cree que podrían convertirse en amenazas a la seguridad si el enfrentamiento con Rusia se profundiza”, según afirmaron funcionarios estadounidenses actuales y anteriores que hablaron con The New York Times bajo condición de anonimato.
“A medida que la economía rusa se desmorona, EE. UU. está aprovechando una oportunidad para promover su agenda entre las autocracias latinoamericanas que podrían empezar a ver al Putin como un aliado cada vez más débil”, apuntó el medio norteamericano.
“Aquí está el petróleo de Venezuela, que está disponible para quien quiera producirlo y comprarlo, ya sea un inversor de Asia, Europa o Estados Unidos”, dijo Maduro en un discurso público el último jueves.
El medio recordó que el mencionado país, Nicaragua y Cuba se abstuvieron o no votaron en las dos resoluciones propuestas en las Naciones Unidas esta semana para condenar la agresión contra Ucrania. Eso evidenciaría que el presidente y otros aliados de Rusia en América Latina se estarían distanciando de dicha ofensiva.
Con información de AFP.