Un caso de violencia infantil conmocionó a la población de Ecuador. Dos hermanitos de seis y ocho años, quienes vivían un infierno al lado de su padre y madrastra, fueron torturados, abusados y quemados en su propio hogar, localizado en la ciudad de San José de Naranjal, en la provincia de Guayas.
Uno de los niños ya fue sometido a varias intervenciones quirúrgicas producto del abuso de sus padres. Por otro lado, se determinó que la menor de ocho años fue víctima de violación y actualmente se encuentra en un albergue.
Infobae reportó que la madrastra —quien fue reconocida por las víctimas como la agresora— llevó al pequeño de seis años al hospital, el 5 de septiembre, porque tenía convulsiones y padecía de un fuerte dolor abdominal.
En el hospital, los médicos quedaron en shock, ya que, al realizar los chequeos del menor, descubrieron que el 80% de su cuerpo tenía quemaduras. El niño también presentaba heridas en su cabeza, manos y piernas. Una radiografía demostró que había sido abusado sexualmente.
Por ello, el pequeño ha sido sometido a siete cirugías para reconstruir su sistema digestivo y tratar de curar la piel quemada. Sobre las quemaduras, la madrastra dijo en el hospital que al niño le “había caído una olla de sopa hirviendo”.
La niña también fue hospitalizada luego de que los exámenes médicos demostraran que había sido violada, golpeada y torturada por su padre y madrastra. Tras ser dada de alta, la pequeña fue derivada a un albergue del Ministerio de Inclusión Económica y Social, donde recibe atención psicológica, informaron las autoridades.
La Fiscalía del Ecuador abrió cuatro investigaciones: dos por agresiones, una por violencia sexual y una por violencia física. Foto: Difusión
PUEDES VER: Ecuador: proponen aumentar los impuestos a los más ricos para mitigar el efecto de la pandemia
Además de la conmoción que ha causado el caso entre la población, se ha cuestionado la falta de empatía de los vecinos del barrio donde vivían los niños. Los habitantes han reconocido que escuchaban los llantos desgarradores de los menores, pero prefirieron callar e ignorar la violencia.
“Todas las mañanas y durante varios días escuchábamos a un niño llorar desesperadamente, su llanto me erizaba la piel”, comentó una de las vecinas a un medio local.
El padre de los menores señaló a un medio televisivo que su hijo de seis años se quemó solo. Cuando la reportera le increpó sobre cómo un niño se iba a provocar tales heridas, dejó de responder. “Recibí la llamada de mi esposa y me dice que mi niño ha sufrido un accidente, que le cayó encima la olla con sopa… Tampoco conozco lo que pasó en sus partes íntimas, me han dado varias versiones”, señaló.
En la misma casa donde los menores fueron torturados, viven otros cinco niños a cargo de la misma mujer, que fue detenida el 9 de septiembre, pero que se mantiene en arresto domiciliario.
La madre biológica de los niños no sabía de su paradero desde el 2017. En ese año, ella fue golpeada por su expareja y estuvo internada en un hospital por una semana. Cuando fue dada de alta y regresó a su hogar, ya no encontró a sus hijos.
La mujer de 22 años decidió buscar a sus hijos por su cuenta sin la ayuda de las autoridades. Así que viajó a varias ciudades, entre ellas Naranjal; sin embargo, nunca encontró a sus pequeños. Cuando los niños fueron internados en el hospital, el hermano de su expareja la contactó por Facebook y le contó lo sucedido.
La progenitora de los niños abusados recibe un abrazo de consuelo por parte de una agente de Unipen, que ayudó en la captura de la madrastra y el padre. Foto: Extra
La mujer, entonces, viajó a ver a sus hijos. A pesar del reencuentro, las autoridades han enfatizado que primero evaluarán las condiciones en las que vivían los niños cuando estaban con su progenitora antes de devolvérselos.
La Fiscalía del Ecuador abrió cuatro investigaciones contra el padre y madrastra: dos por agresiones, una por violencia sexual y una por violencia física.
Una joven dio a luz en un hospital de Ecuador, pero por una negligencia médica conservó una pinza dentro de su cuerpo durante poco más de seis meses tras someterse a una cesárea. La mujer comentó que descarta volver a embarazarse debido al traumático y doloroso incidente.
Lesly Cagua, una joven madre de 20 años, tuvo a su hijo a mediados de marzo en el hospital Delfina Torres, ubicado en la ciudad de Esmeraldas. La víctima denunció, a través del canal local Ecuavisa, que los médicos olvidaron una pinza de aproximadamente 20 centímetros dentro de su cuerpo.
Cagua sufrió un leve cuadro de neumonía a causa de una bacteria que contrajo debido al instrumento quirúrgico que yacía en el interior de su vientre. Esa no fue la única tragedia, ya que su bebé falleció después de 22 días de su nacimiento.
Un padre de tres niñas murió, súbitamente, por causas naturales en su casa de Burghausen, ubicada en el sur de Alemania. Tras esta tragedia, su hija mayor, de 4 años, se vio en la necesidad de cuidar sola a sus dos hermanas menores durante tres días, informó la Policía.
El deceso del hombre de 35 años ocurrió la madrugada del 14 de septiembre, por lo que las tres niñas de cuatro, tres y dos años de edad quedaron sin cuidado adulto. Tres días después, las pequeñas fueron encontradas por una tía y actuaban como si su padre estuviese durmiendo.
Tras confirmarse la muerte del padre, la tía se está haciendo cargo del cuidado de las tres pequeñas. Foto: Referencial / Dreamstime
Vyacheslav M, un hombre de 34 años de la región de Samara, Rusia, se encontraba con su mejor amigo, Oleg Sviridov, de 32, cuando revisó su celular y descubrió varios videos donde abusaba sexualmente de menores de edad, incluida su hija de 8 años.
La primera reacción del hombre fue enfrentarse de inmediato a Sviridov, quien se escapó antes de que pudiera hacerle algo. El pedófilo era amigo íntimo de la familia de Vyacheslav y cuidó en muchas ocasiones a la niña, a la que agredió en varios momentos.
Vyacheslav denunció a su amigo ante la Policía local, que inició una persecución contra Sviridov. Sin embargo, el padre logró dar primero con el paradero de Sviridov y lo con un arma blanca, informa ABC.
Más tarde, el hombre les dijo a las autoridades que Sviridov había “tropezado con el cuchillo durante una pelea” en un bosque cerca de la aldea donde ocurrió el suceso, y negó así que él lo haya asesinado intencionalmente.
Sviridov, el abusador (izquierda) fotografiado con su examigo Vyacheslav. Foto: Clarín