Cargando...
Mundo

“Todavía creemos que hay amenazas específicas”: EE. UU. advierte sobre más atentados en Kabul

Las operaciones de salida de extranjeros y afganos se reanudaron esta mañana en el aeródromo, un día después del sangriento atentado que dejó al menos 170 muertos y más de 200 heridos.

larepublica.pe
El Pentágono reveló también que solo hubo un atacante suicida en el "complejo" atentado del jueves, y que no dos explosiones separadas, como se creyó inicialmente. Foto: AFP

Estados Unidos advirtió este viernes que la amenaza de atentados persiste en Kabul tras el sangriento ataque del Estado Islámico, mientras más de 5.000 personas siguen dentro del aeropuerto esperando a ser evacuadas.

Las operaciones de salida de extranjeros y afganos se reanudaron esta mañana en el aeródromo, un día después del sangriento atentado que dejó al menos 170 personas muertas y 200 heridos, según el balance realizado por el Ministerio de Salud del país. “El número de fallecidos por el doble ataque con bomba alcanzó al menos 170″, comunicó dicha entidad por la cadena CBS.

Pero varios países anunciaron que terminaron sus operaciones, entre ellos España, Italia, Noruega o Suiza. Gran Bretaña lo hará “en pocas horas”.

Francia sugirió que podría seguir sacando personas de Afganistán “más allá del viernes” y una delegación francesa se reunió en Doha con representantes de los talibanes por primera vez desde que tomaron el poder en Afganistán el 15 de agosto.

Estados Unidos asume así prácticamente en solitario la tensa misión de concluir la mayor operación de evacuación de la historia de aquí al 31 de agosto, fecha elegida por el presidente Joe Biden para cerrar 20 años de presencia militar en el país.

Todavía creemos que hay amenazas específicas y creíbles”, indicó el portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, John Kirby. A pesar de todo, Estados Unidos cree que podrá sacar a gente “hasta el último momento”.

Dentro del aeropuerto hay 5.400 personas, precisó el Pentágono. En las últimas 24 horas, a pesar del ataque, se logró evacuar a 12.500 personas en un total de 89 vuelos estadounidenses y de la coalición internacional.

El Pentágono reveló también que solo hubo un atacante suicida en el “complejo” atentado del jueves, y que no dos explosiones separadas, como se creyó inicialmente.

Londres anunció que entre las víctimas mortales había dos británicos.

Pánico y desolación

Las explosiones sembraron el pánico y la desolación. Decenas de personas, muertas o heridas, yacieron durante horas tendidas en las aguas sucias de un canal de desagüe que bordea el aeropuerto.

“Hay muchas mujeres y niños entre las víctimas. La mayoría de la gente está conmocionada, traumatizada”, dijo este viernes a la AFP un responsable del gobierno depuesto a mediados de agosto por los talibanes.

A los más de 170 afganos muertos se suman los 13 militares estadounidenses fallecidos y otros 18 heridos, la mayor pérdida del ejército estadounidense en Afganistán desde 2011.

“Seguimos comprometidos”

En el peor momento desde el inicio de su mandato, un conmovido Biden prometió “perseguir” a los autores del ataque y hacerles “pagar” sus consecuencias. “Estados Unidos no se dejará intimidar”, dijo el mandatario.

Los talibanes, a través de su portavoz Zabihullah Mujahid, condenaron “firmemente” el ataque, pero señalaron que “tuvo lugar en una zona donde las fuerzas estadounidenses son responsables de la seguridad”.

Bajo el nombre de EI-K (Estado Islámico Khorasan), el grupo yihadista ha reivindicado algunos de los ataques más sangrientos perpetrados en Afganistán en los últimos años, que dejaron decenas de muertos, especialmente entre los musulmanes chiitas.

Aunque ambos son sunitas radicales, el EI y los talibanes son enemigos y muestran un odio visceral mutuo.

Este viernes, una extraña calma reinaba en Kabul, sobre todo alrededor del aeropuerto, donde los talibanes habían reforzado sus controles y la multitud había desaparecido en algunos puntos.

Con información de AFP