La Fiscalía de Brasil abrió una investigación contra los organizadores de la marcha que reunió el último sábado, en Sao Paulo, a miles de motociclistas, encabezados por el presidente Jair Bolsonaro, por incumplir las medidas sanitarias impuestas durante la pandemia de coronavirus.
El fiscal de Sao Paulo, Arthur Pinto Filho, envió además un oficio al Ministerio Público Federal para que tome las “medidas que estime oportunas para investigar al presidente de la República y demás autoridades” con fuero privilegiado que participaron en el acto Acelera para Cristo.
El evento, alentado por Bolsonaro los días precedentes, reunió a unos 12.000 motociclistas en Sao Paulo, según las autoridades brasileñas, pese a las restricciones vigentes en la región por la COVID-19, que ya ha matado a casi 490.000 personas en el país.
El mandatario, líder de una extrema derecha que desdeña la gravedad del coronavirus, comandó la caravana de motos sin usar mascarilla, cuyo uso censura y hasta llegó a poner en duda su eficacia contra el SARS-CoV-2.
Bolsonaro “actuó como siempre actúa al no respetar las reglas vigentes de tránsito (consta que su moto tenía la matrícula tapada y que utilizó un casco irregular), violar” las normas “que tienen por objeto aminorar los efectos de la pandemia, criticar las mascarillas y el distanciamiento social, etc”, indicó el fiscal.
“Gran parte de los organizadores y participantes del acto se comportaron de la misma forma: violaron las leyes y decretos que están en pleno vigor en el estado de Sao Paulo, incumpliendo completamente lo pactado en la reunión previa con la Policía”, completó.