El viernes 12 de marzo, un policía fue acusado de secuestro y homicidio en Londres, tras el hallazgo e identificación del cuerpo de una joven llamada Sarah Everard, desaparecida el 3 de marzo, un caso que ha conmocionado en Reino Unido; incluso el primer ministro condenó el crimen.
La Policía metropolitana de Londres anunció que el agente de su unidad de protección de representaciones diplomáticas Wayne Couzens, de 48 años, fue acusado por la muerte de Sarah Everard.
La profesional de marketing de 33 años desapareció cuando regresaba caminando a su casa en el sur de la capital. La Fiscalía confirmó en un comunicado que el sospechoso fue acusado de “secuestro y homicidio”.
El policía Wayne Couzens, que el sábado 19 de marzo comparece ante un juez, fue detenido en la noche del martes 9 en Kent (sureste de Inglaterra), donde reside y donde el cuerpo de la víctima fue hallado el miércoles 10 en un bosque.
Sarah Everard había visitado a sus amigos en Clapgam, sur de Londres, y regresaba a Brixton, a unos 50 minutos de caminata, cuando desapareció hacia las 21.30 de la noche.
A través de su cuenta de Twitter, el primer ministro Boris Johnson se declaró “impactado y entristecido” por este caso, e instó a “trabajar rápidamente para encontrar todas las respuestas a este horrible crimen”.
El policía inculpado por homicidio es también sospechoso de exhibición sexual. Foto: Twitter
El policía acusado de homicidio también es sospechoso de exhibición sexual. La autoridad que fiscaliza a los policías (IOPC) señaló que se va a investigar si los agentes trataron de manera “apropiada” estos hechos, que habrían ocurrido el 28 de febrero en un restaurante de comida rápida, unos días antes de la desaparición de Sarah Everard.
Citada en un comunicado de la Policía, la familia de la víctima describe a la joven como “fuerte”, “alegre y bonita”, “amable y cariñosa”.
Wayne Couzens ingresó a la Policía londinense en septiembre de 2018. Desde febrero de 2020 formaba parte de una unidad armada y uniformada encargada de proteger las embajadas y otras representaciones diplomáticas, preciso la autoridad.
El sospechoso tuvo que recibir cuidados en el hospital en dos ocasiones por heridas infligidas en una celda durante su arresto, señaló la Policía.
La muerte de Sarah Everard ha provocado una profunda conmoción en Reino Unido. El jueves 11 de marzo, la diputada Jess Phillips leyó ante la Cámara los nombres de 118 mujeres asesinadas el año pasado en el país.
Varias asociaciones convocaron para el sábado 13 de marzo vigilias en memoria de Sarah Everard, pero la Policía advirtió que estas congregaciones son ilegales debido a las restricciones sanitarias. Las organizaciones se exponen a una multa de 10.000 libras esterlinas (unos 12.670 dólares).
Confinado desde hace más de dos meses, Reino Unido empieza a aliviar progresivamente algunas restricciones. El coronavirus ha dejado más de 125.000 muertos, el balance más duro en Europa.
Con información de AFP