Un concesionario autorizado de Ferrari, compañía de automóviles deportivos italiana, situado en la ciudad de Caracas, capital de Venezuela, desató la polémica en el país petrolero, afectado en los últimos años por una severa crisis económica.
Como se plasma en el sitio web de la emblemática empresa, el local se llama Maranello Motorsport y está ubicado en Las Mercedes, un sitio históricamente pudiente de Caracas. Ya cuentan con una amplia gama de coches usados y nuevos.
Específicamente en la avenida Jalisco, municipio Baruta, Ferrari tiene previsto que la sede sirva como un taller autorizado en el cual ofrecerán servicios de asistencia y reparación de carrocería.
En la página de Ferrari se comprueba que la sede en Las Mercedes ya está en funcionamiento. Foto: captura de web
Ahora, Venezuela forma parte de una lista selecta de países latinoamericanos que tienen concesionarios de Ferrari. El resto son Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Panamá y Puerto Rico —que técnicamente forma parte de Estados Unidos—.
Ni en Bolivia, Perú o Uruguay tienen este tipo de locales, a pesar de que son naciones que en la última década han tenido un crecimiento sostenido de su PBI.
Rápidamente, en redes sociales miles de personas en Venezuela reaccionaron a esta noticia, incluida la opositora Delsa Solórzano. “Ayer, mientras los maestros protestaban por ganar un salario de hambre de $ 2, se inauguraba un concesionario Ferrari en Caracas”.
Maduro también reconoció que el bombeo de la estatal petrolera Pdvsa cayó un 69% entre 2015 y 2019. Foto: AFP
En Twitter escribió este sábado 16 de enero que “el carro más barato cuesta $ 300.000”. Mientras que hay algunos como el Ferrari Roma, que vale 255.000 dólares, o el Ferrari Monza SP2, tasado en 1,5 millones de euros.
“Esa es la ‘justicia social’ del socialismo bolivariano”, criticó Solórzano. “Solo para enchufados”, añadió, en referencia a las personas que en Venezuela son señaladas como cercanos al chavismo, por lo cual reciben tratos beneficiosos en dólares.
Delsa Solórzano
Por su parte, el comisionado presidencial para las Relaciones Exteriores del Gobierno interino, Julio Borges, condenó que “en un país quebrado donde venezolanos ganan menos de $ 2 al mes y mueren de hambre, el régimen y sus cómplices inauguran concesionario Ferrari”.
“Es el reflejo de la indolencia y degradación moral de la dictadura. Son corruptos y lavadores de dinero que expanden sus negocios ilegales”, escribió Borges en su tuit.
El martes 12 de enero, durante su mensaje anual, el cuestionado presidente venezolano Nicolás Maduro admitió la grave crisis económica en la nación caribeña, pero provocada por la “desquiciada política” de Estados Unidos con sus sanciones internacionales.
“Estas y no otras son las razones de la brutal contracción económica de este período”, aseveró Maduro.