Delta se ha convertido en un peligroso huracán de categoría 4 este martes, con vientos máximos sostenidos de 145 millas por hora (230 km/h), mientras se dirige a la costa noreste de la Península de Yucatán (México) y se aleja de las Islas Caimán.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de Estados Unidos señaló que Delta era un huracán de categoría 2, pero ha proseguido una rápida intensificación en la escala Saffir Simpon por lo que puede producir “una marejada de tormenta extrema y peligrosa”.
Hasta ahora, el centro de Delta se encontraba a unas 215 millas (345 km) al este-sureste de Cozumel y a 240 millas (385 km) al este-sureste de la ciudad de Tulum, en la Península de Yucatán. Se mueve a 17 millas por hora (28 km/h) en dirección oeste-noroeste, según el NHC.
El potente huracán se ha alejado de las Islas Caimán y se espera que el miércoles por la mañana impacte con categoría 4 (huracán mayor) en la parte nororiental de la Península de Yucatán para luego entrar al Golfo de México y de acuerdo al patrón de trayectoria, terminar impactando en algún punto de la costa de Estados Unidos el viernes.
El Gobierno de Cuba ha desactivado la vigilancia de tormenta tropical, mientras que en la Península de Yucatán rige una advertencia de huracán para Cozumel y una parte de la costa que va de Tulum a Dzilam.
La península mexicana acaba de sufrir los efectos de la tormenta tropical Gamma, ya degradada, que descargó fuertes lluvias y vientos en esa zona del sureste de México.
Los vientos con fuerza de huracán de Delta se extienden hasta 30 millas (45 km) del centro y los de tormenta tropical hasta 105 millas (165 km).
Considerado como el más peligroso huracán de los últimos años en la zona, Delta ha puesto en alerta al sureste de México, con una economía dependiente del turismo, y ha provocado el cierre de hoteles y zonas arqueológicas, entre ellas las concurridas Chichen Itzá (Yucatán) y Tulum (Quintana Roo).
El huracán es el más peligroso que Quintana Roo ha recibido en 15 años, advirtió el gobernador del estado, Carlos Joaquín, en una comparecencia junto al secretario de Marina, José Rafael Ojeda, y la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez.
El gobernador detalló que Delta tiene más de 1.000 metros de diámetro por lo que “prácticamente todo el estado va a tener un impacto de tormenta” hasta el mediodía del miércoles, y auguró cortes en el suministro eléctrico de la región.