La expansión del nuevo coronavirus ha generado un impacto negativo en la economía de diferentes países y México no ha sido la excepción. En este contexto, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó una de las 68 propuestas planteadas por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Durante su conferencia de prensa habitual, AMLO negó la posibilidad de realzar el endeudamiento en un rango de entre 0.5 y 5 % del Producto Interno Bruto (PIB), con la finalidad de enfrentar la crisis generada por la COVID-19.
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“Con todo respeto, nosotros no vamos a continuar con más de lo mismo, no van a haber rescates para los potentados”, afirmó el mandatario.
Según había expresado el consejo empresarial, el proceso se llevaría a cabo de forma responsable e hicieron un llamado para que el presidente se sensibilice y tome las decisiones adecuadas para el proceso de recuperación económica.
“El Estado tiene que proteger a todos y no actuar otorgando privilegios para nadie, se tiene que poner adelante el interés general”, refirió.
Pese a ello, Andrés Manuel López Obrador señaló que dará preferencia a los más pobres, frente a la crisis económica formada a partir de la pandemia, por lo que no comprometerá su futuro con la deuda.
“Si va haber una quiebra de una empresa, que sea el empresario el que asuma la responsabilidad o los socios o accionistas”, destacó.
Sin embargo, AMLO resaltó que no existe una posición en contra de los empresarios, ya que la mayoría ha actuado de forma correcta durante el estado de emergencia establecido por la expansión de la enfermedad.
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“No estamos en contra de los empresarios, siempre he dicho que quien invierte, genera empleos, merece todo mi respeto. No todo el que tiene es malvado”, finalizó.