Una extraña práctica ha llamado la atención en Vietnam y ha levantado la voz de protesta de las organizaciones defensoras de los animales, por la crudeza con la que son asesinados los gatos de color negro para convertirlos en pastas, que supuestamente serían beneficiosos para la cura del coronavirus.
El producto final se vende en el país asiático o ha llegado a portales de internet, pero hasta la actualidad no ha tenido efecto alguno en las personas que lo han utilizado.
El hecho fue denunciado por la asociación de defensa canina “No to Dog Meat” (No a la carne de perro - en español). Según la entidad, la práctica se concentra en la capital vietnamita, Hanoi. Las imágenes de docenas de gatos asesinados se volvieron virales, pero el blog decidió no mostrarlas.
El medio South West News Service, informó que la protectora de animales denunció que los gatos preferidos son los de color negro, los cuales son asesinados y posteriormente hervidos. Luego se les saca la piel y los procesan hasta que se conviertan en un tipo crema supuestamente medicinal y efectiva en contra la COVID-19.
No existe sustento científico de que los gatos negros curen el coronavirus, señalan.
Julia de Cadenet, fundadora de No a Dog Meat, dijo que el video del final de los felinos fue “angustiante” y le “heló la sangre”, conocer cómo preparan la pasta. El mundo le tiene miedo a la COVID-19, pero no hay excusa para esta “crueldad terrible”, agregó Julia.
Los gatos preferidos son los de color negro.
Voces de organismos internacionales se han hecho escuchar y han pedido que se frenen estas crueles prácticas, pues no existe sustento científico de que los gatos negros curen el coronavirus y sobre todo, porque algunas prácticas con animales pueden desatar otro tipo de enfermedades.
Hace pocas semanas, se conoció que en China se prohibió el consumo de animales silvestres, además que los perros y gatos fueron reconocidos como mascotas. También, que dos ciudades chinas, Shenzhen y Zhuhai, prohibieron el consumo de carne de perro y gato, aunque aún queda mucho por hacer en Asia en materia de derechos de los animales.