Chile fue el último de varios países en América Latina en decretar un toque de queda nocturno para enfrentar la pandemia del coronavirus, sumándose a Ecuador, Bolivia y Perú.
El toque de queda en Chile tendrá vigor “en todo el territorio nacional desde las 22H00 horas hasta las 5H00 AM del día siguiente”, anunció el domingo Jaime Mañalich, ministro de salud del país, que suma 632 casos confirmados y un muerto.
Ecuador, que registró este domingo su mayor crecimiento diario de muertos y casos por coronavirus, implementó una medida similar el martes. En ese país se han registrado 14 fallecidos y 789 infectados, según el más reciente balance del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE).
El viernes también impuso toque de queda República Dominicana. Más radical, Guatemala inicia un toque de queda este domingo, desde las 16H00 a las 04H00 del día siguiente.
Los gobiernos de la región tratan de aumentar las formas de resistencia a la COVID-19, que comienza a extenderse por el continente americano luego de causar estragos en Asia y Europa. Bolivia, Argentina, El Salvador y Paraguay han optado por la cuarentena total de su población.
En América Latina, suman 1.689 las infecciones del nuevo coronavirus, con 14 muertos, según un conteo de la AFP.
Tras decretar el aislamiento obligatorio, el gobierno boliviano lamentó el domingo la persistencia de focos de resistencia a la medida. “No nos alcanza con 98% de inamovilidad. Vamos a derrotar al coronavirus solo con el 100%”, remarcó el ministro de Defensa, Luis Fernando López.
Además, el país aplazó indefinidamente las elecciones generales previstas para el 3 de mayo.
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, también ordenó una cuarentena domiciliaria obligatoria por 30 días.
Buenos Aires y la mayoría de las ciudades argentinas lucían desoladas el fin de semana, como efecto de la cuarentena obligatoria ordenada por el presidente Alberto Fernández para enfrentar la crisis, en un país que registra 225 contagios, entre ellos cuatro muertos.
Colombia se sumará el miércoles y durante 19 días sus más de 48 millones de habitantes deberán confinarse por orden gubernamental.
A diferencia de la gran mayoría de las autoridades mundiales, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, insiste en que la crisis del coronavirus tiene un componente de “histeria”. En el gigante sudamericano, la pandemia deja 25 muertos y 1.546 casos confirmados.
En México, la presidencia también ha restado importancia a la pandemia. Por el contrario, universidades y escuelas privadas cerraron sus puertas por iniciativa propia y varias empresas cancelaron eventos y enviaron a casa a sus empleados.
“Como que lo toma muy a la ligera. Depende de nosotros tomar las medidas precautorias”, dijo a la AFP Lizet Espinosa, una funcionaria pública de 26 años, en referencia al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien se resiste a tomar medidas drásticas.
En Venezuela, Nicolás Maduro decretó el aislamiento obligatorio, suspendió las clases y la actividad del sector público. Este domingo, detalló que se han reportado 77 casos de COVID-19 en el territorio y radicalizó las medidas.
En el país sudamericano es obligatorio el uso de mascarillas.