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Gobierno de México comenzó la repatriación de ciudadano que residía en Wuhan

Las autoridades detallaron que el mexicano se encuentra en buen estado de salud, a pesar de vivir en el epicentro del brote de coronavirus.

larepublica.pe
El gobierno chino desalienta a los países de la comunidad internacional a evacuar a sus ciudadanos. (Foto: Fox Business)

El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha repatriado al ciudadano mexicano Jesús Daniel Stamatis Portugal que residía en Wuhan, China, lugar donde fue el brote del coronavirus y se han reportado, hasta el momento, 106 muertos.

Según señalaron las autoridades en la conferencia de prensa matutina del presidente, el compatriota se encuentra de retorno al país y su estado de salud es óptimo, no presenta síntomas del virus.

“El ciudadano mexicano ya está en camino, viene muy pronto y está en perfectas condiciones. No es una situación de un traslado de urgencia”, aclaró el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de México, Hugo López-Grattel.

El funcionario trajo a colación que la semana pasada, en reunión con representantes de las Secretarías de Salud y de Relaciones exteriores, acordaron poner en marcha un mecanismo de apoyo a mexicanos a través de la embajada y consulados de México en China.

No pueden evacuar

Luego de la salida del mexicano, las autoridades chinas emitieron la recomendación a los países de la comunidad internacional que no evacúen a sus ciudadanos que se encuentran en Wuhan.

A pesar de dicha comunicación, países europeos como España han previsto retirar a sus compatriotas de la ciudad en donde se encuentra la mayor cantidad de infectados con el coronavirus.

El Ministerio de Exteriores de China realizó una convocatoria dirigida a los representantes diplomáticos acreditados en Pekín con la finalidad de comentarles a detalle la lucha contra esta epidemia. Además, les pidió mantener la calma y no evacuar a sus ciudadanos.

No obstante, las autoridades chinas no prohibirán la salida de extranjeros de Wuhan, pero sí buscan desalentar a los gobiernos porque supone un alto riesgo para la propagación del virus.