Un niño de 4 años jugaba con su padre a las luchas libres en su casa de Bloomington, Indiana, (Estados Unidos) pero todo se salió de control cuando el arma que el padre tenía oculta en su bolsillo, se disparó. La bala impactó tanto a la cabeza del niño, como a su padre.
El trágico incidente se produjo la tarde del último domingo, cuando Tyler Shaw, de 36 años, jugaba con su hijo en la cama de su habitación. La pistola que el padre había metido en el bolsillo trasero de su pantalón cayó y se disparó. La misma bala los alcanzó a ambos.
Padre e hijo fueron llevados de emergencia a la clínica, pero días después, el pequeño Tripp falleció en el Hospital de Niños Riley, mientras que su padre se encuentra internado en el Hospital Bloomington Health y se espera su recuperación.
Una vez conocido el caso, se organizó una campaña a través de la plataforma GofundMe, donde se recauda dinero para ayudar a Shaw y su esposa Natalie, quienes también son padres de dos niñas, para que puedan cubrir los gastos médicos y de sepelio del pequeño Tripp.
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La campaña logró recaudar más de 19 mil dólares hasta la tarde del sábado. “Realmente se necesita un pueblo y rezo para que la carga de la deuda médica no se nuble por su dolor”, escribió en Facebook la tía de Tripp, Nikki Hughes.
Como parte de las investigaciones, la pistola que le pertenecía al padre, fue enviada a prueba para determinar por qué se disparó inesperadamente. Aunque las autoridades no han establecido si se presentarán cargos.
Según informa Daily Mail, en Indiana, una persona puede ser acusada de imprudencia criminal si realiza sin querer o a sabiendas un acto que crea un riesgo de daño corporal a otra persona, mientras esté armado con un arma mortal. Aún no se ha establecido si Shaw contaba con permiso para portar el arma.