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Evo Morales brinda detalles de cómo armaron un “golpe de Estado” contra él

En una reciente entrevista, el expresidente habló sobre los movimientos “sospechosos” de los militares y la oposición en las últimas horas de su mandato.

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Evo Morales habló sobre un "golpe de Estado" orquestado por la oposición y los militares. Foto: CNN.

El expresidente de Bolivia, Evo Morales, contó los pormenores de las últimas horas de su mandato, tiempo en que se habría orquestado un “golpe de Estado” a sus espaldas.

En declaraciones a CNN, Morales comenzó el relato con los hechos del 9 de noviembre, el día anterior a su renuncia: “Yo tenía reunión de emergencia con mi equipo de seguridad, que me muestra mensajes que daban cuenta de las coordinaciones para entregarme. Estaba programado un operativo y recibirían ’50 palos grandes’ para que me entreguen a grupos de la derecha".

“El domingo 10 de noviembre, yo estaba en El Alto. Primero nos informan que la OEA había decidido adelantar el informe de auditoría electoral, que sería un informe político y no técnico. Salió esa madrugada cuando estaba programado para el 13”, cuenta Evo Morales.

El exmandatario señala que demandó a la OEA que detengan ese informe porque desataría “un incendio” en Bolivia. “Por eso la OEA también es responsable de los muertos”, añadió.

Morales recuerda que ese mismo día, cuando se dispuso a tomar el avión presidencial, el piloto no quiso abrirle la puerta. “Y aún yo no había renunciado a la presidencia”, precisa.

“Me parecía sospechoso”.

Después de que un alto mando dio la orden, Morales arribó el avión. Sin embargo, lo llevaron a un terminal militar, no uno comercial.

“Yo pregunté al piloto qué ha pasado. Y en ese momento vi a varios carros yendo hacia la terminal militar. Entonces yo me bajé. Después me informaron que habían militares bien armados”.

Asimismo, indica que antes que aterrizara, el Comandante en Jefe de las FF. AA. ya había pedido su renuncia.

“Entonces es un golpe bien preparado”.

Evo Morales está asilado en México, país desde donde defiende su postura como víctima de un golpe de Estado cívico-político-policial. Además, critica constantemente al nuevo gobierno de la derecha en Bolivia.