La noche de este miércoles, la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Añez, juramentó a su nuevo gabinete de Estado.
A través de la red social, la abogada de 52 años, publicó una fotografía del momento en el que posesiona sus once ministros.
“Gracias por acompañarme en esta difícil tarea. Juntos por la democracia”, escribió.
Más temprano, Áñez nombró a una nueva cúpula militar y negó haber llegado al poder mediante un “golpe de Estado”, como lo afirma el exmandatario Evo Morales, asilado en México.
“No hay un golpe de Estado en Bolivia, hay una reposición constitucional”, afirmó Áñez en una rueda de prensa en el Palacio Quemado, la casa de gobierno, al día siguiente de asumir el poder. La dirigente reiteró que convocará a elecciones “en el plazo más breve posible”.
“El único golpista de este país ha sido Evo Morales”, dijo Áñez, aludiendo a que el exmandatario izquierdista indígena desconoció el veredicto popular en un referendo que se opuso a la reelección indefinida en 2016 y en los comicios del 20 de octubre, en los que ganó una polémica reelección, que la oposición atribuyó a un “fraude”.
El escrutinio desató las multitudinarias y violentas protestas que condujeron a su renuncia.
“No aceptaré ninguna salida que no sean unas elecciones democráticas”, afirmó la presidenta derechista, quien era segunda vicepresidenta del Senado al momento de tomar las riendas del país el martes.