Si algo caracterizaba al científico Albert Einstein, además de su gran inteligencia, era su cabello: siempre alborotado y rebelde. Pero todo tiene una explicación y la del autor de la teoría de la relatividad sería una extraña anomalía genética.
Según afirman algunos especialistas, Einstein padecía del síndrome del cabello impeinable. El Centro de Información de Enfermedades raras y genéticas de Estados Unidos (GARD) sostiene que esta condición afecta al tallo del pelo en el cuero cabelludo.
“Se caracteriza por cabello seco, rizado, de color café claro o rubio que se proyecta para fuera, y crece en diferentes direcciones, siendo prácticamente imposible de peinarse”, recoge Bio Bio Chile.
Albert Einstein
El GARD explica que el síndrome empieza a manifestarse a los tres meses de nacido. No todo el cabello se ve afectado, sino un aproximado del 50%.
Quienes padecen de la condición tienen un crecimiento lento del cabello. Es grueso, desordenado, lanoso y casi siempre de un tono claro o blanco como en el caso de Albert Einstein.
Para determinar si se tiene la afección, se debe realizar una observación microscópica del cabello. De acuerdo con el centro especializado, los pelos no son redondos en la sección transversal, sino con forma triangular o de corazón.
Shila, una niña con el síndrome del cabello impeinable.
Precisamente esta característica hace que los cabellos crezcan apuntando hacia afuera, como si los pelos no pudieran caber entre sí. No obstante, existen casos en los que el síndrome puede relacionarse con otras enfermedades, por lo que es necesario hacer descartes.
Los cabellos con esta alteración pueden ser ‘peinados’, pero los pelos siempre se verán como ‘disparados’. Sin embargo, conforme pasa la edad, va mejorando la situación.
Andy, otra niña con cabello impeinable.
Algunos estudios señalan que el uso de la biotina oral puede hacer que sea más manejable. No obstante, no cambiará su aspecto bajo el microscopio, por lo que los cambios no necesariamente son permanentes.