Desde el jueves el Ecuador ha vivido conmocionado por las diversas protestas que han desarrollado diversos colectivos del país meridional, donde han rechazado los recientes anuncios económicos del presidente ecuatoriano Lenín Moreno.
Considerado un “paquetazo” por opositores al Gobierno, el plan de Moreno estableció la eliminación de los subsidios para el uso de combustibles fósiles y la liberación del precio del diésel y la gasolina extra y extra con etanol.
Se trata de un alza, específicamente, de 1,85 a 2,39 dólares en la gasolina extra, la más popular, y de 1,03 a 2,27 en la diesel premium.
Paros, manifestaciones, ataques a cajeros automáticos y asaltos a almacenes se multiplicaron tras el corte de los subsidios pactado con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Además, Moreno ordenó reducir el periodo vacacional de los empleados públicos de 30 a 15 días y ahora deberán donar un mes de su salario mensual.
El mismo jueves se registraron enfrentamientos entre policías y manifestantes en la capital de la nación suramericana (Quito), donde unos 21 efectivos resultaron heridos, mientras que el saldo de los civiles fue de 14.
Fuertes protestas este sábado en las afueras de la ciudad de Latacunga, al sur de Quito. Foto: EFE
Las autoridades han informado que hay al menos 350 detenidos y pérdidas millonarias del erario público. Solo en Quito se perdió casi 300 millones de dólares por afectaciones, el paro comercial y otras acciones ciudadanas, informó el alcalde de la ciudad, Jorge Yunda.
Los transportistas ya suspendieron la huelga y este lunes vuelven las clases a nivel nacional, pero las manifestaciones no han cesado. Un multitudinario grupo de indígenas marcha en dirección a Quito.
Los aborígenes prevén un ingreso masivo a la capital el próximo martes para sumarse, un día después, a una huelga nacional con los sindicatos y otros colectivos sociales en contra del Gobierno al que tildan de “neoliberal”, refiere EFE.
Acosado por un alto endeudamiento y falta de liquidez en la dolarizada economía, el Gobierno del mandatario Lenín Moreno pactó un millonario programa de créditos con el FMI que incluye el desmonte de esos subsidios, que demandaban 1.300 millones de dólares al año.
“Bajo ninguna circunstancia vamos a cambiar la medida. Que se oiga bien, no voy a cambiar la medida. Que quede claro, se eliminó el subsidio, se acabó la zanganería”, aseveró Moreno.
Entretanto Ecuador está bajo un estado de excepción, de 60 días, dictaminado por el Ejecutivo ante las fuertes protestas acontecidas.