Desde el 2020 a marzo de 2023, el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) ha multado por más de S/25 millones a las empresas operadoras del servicio móvil por infracciones relacionadas con fiscalizaciones de la venta de chips para celulares en la vía pública.
De los S/25 millones 353.518 con los que se sancionó a las empresas por incurrir en esta práctica pese a estar prohibida, el mayor monto corresponde a Telefónica, con S/7,59 millones (30%); seguido de Claro, con S/6,27 millones (25%); Entel, con S/6,09 millones (24%); y Bitel, con S/5,40 millones (21%).
El director de Fiscalización e Instrucción del Osiptel, Luis Pacheco, señaló que la adquisición de chips para teléfonos en la vía pública está prohibida, puesto que, de acuerdo con las normas vigentes, la contratación de servicios móviles a través de distribuidores se realiza solo en puntos de venta con dirección específica y que se encuentren previamente reportados por las compañías operadoras al ente regulador.
“El Osiptel ha establecido reglas mínimas respecto de los canales de comercialización de las empresas operadoras, para que la contratación del servicio se lleve a cabo brindando información suficiente al usuario y se registre de forma adecuada la titularidad de los servicios públicos de telecomunicaciones”, añadió.
Los ciudadanos que contratan líneas móviles ambulatoriamente entregan información de su huella dactilar a un desconocido en la calle y corren el riesgo del robo de su identidad en transacciones que, al carecer de control y fiscalización oficial, pueden derivar en acciones delictivas y de organización criminal.
A continuación, algunos de los peligros derivados de la venta de chips en la vía pública, según Osiptel: