El 15 de enero de este año ocurrió uno de los peores desastres ecológicos en las costas de Perú. La refinería La Pampilla, subsidiaria de la empresa española Repsol, vertió más de 11.900 barriles de crudo de petróleo en el litoral peruano. Esto afectó gravemente la flora y la fauna de más de 20 playas de Ventanilla, así como a cientos de familias que viven por la zona y que se dedicaban a la actividad pesquera.
En esa línea, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), entidad adscrita al Ministerio del Ambiente, se ha encargado de supervisar las labores de limpieza llevadas a cabo por Repsol en los últimos meses. Además, en junio se dispuso que la refinería cumpla con 16 acciones administrativas de remediación y limpieza. De las cuales, la empresa incumplió siete, por lo que se le impuso una multa de S/ 2 millones 852 mil, que ya fue cancelada.
Ahora, el ente regulador ha dispuesto nuevas responsabilidades: por dar información falsa y por no realizar acciones de contención y limpieza adecuadas. Lee más detalles a continuación.
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El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) ha impuesto dos multas que suman S/ 42 millones 964 mil 377 a la Refinería La Pampilla S.A.A. de Repsol. La primera sanción asciende a S/ 13 millones 800 mil (3.000 UIT) y se da debido a que la empresa petrolera no dio información verídica en el reporte de emergencia con relación al cálculo de volumen de petróleo crudo derramado y el área afectada.
Asimismo, la segunda multa es de S/ 29 millones 164 mil 377 (6.340 UIT) por no brindar de forma oportuna acciones para la recuperación del hidrocarburo y actividades de limpieza del área de suelo afectado.
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El derrame de petróleo crudo tuvo lugar en la terminal número 2 de la refinería La Pampilla, en Ventanilla, y fue causado presuntamente por el desprendimiento de la plataforma de colectores. Además, ese día, 15 de enero del 2022, también se reportaron mareas altas producto del tsunami generado tras la erupción volcánica en Tonga, lo que habría agravado el accidente.
Según reportes del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), el grave desastre ecológico afectó zonas naturales protegidas y dejó más de 950 aves cubiertas de petróleo, de especies como el guanay, el piquero peruano, cormorán el pelícano y la gaviota peruana.
Asimismo, en un principio, Repsol informó que el derrame en las playas de ventanilla fue solamente de siete galones. No obstante, horas después se supo que fueron más de 6.000 barriles de petróleo los que contaminaron las costas peruanas.