En la década de 1960, durante el gobierno del expresidente Fernando Belaúnde, se ordenó la construcción del fundo Santa Mónica en San Isidro, un conjunto de 44 viviendas destinadas a oficiales del Ejército en servicio activo que no contaban con hogar propio. Sin embargo, en 2009, estas propiedades pasaron al Fondo de Vivienda Militar del Ejército (FOVIME), una entidad creada para proporcionar viviendas a militares. Contrario a su propósito inicial, el FOVIME inició el desalojo de los oficiales que residían en estas casas. Hoy, solo seis de las viviendas permanecen ocupadas, aunque con procesos de desalojo pendientes. Esto deja en el limbo al terreno de 9,281 metros cuadrados.
En 2009, la Superintendencia de Bienes Nacionales transfirió el terreno al Ministerio de Defensa, con la condición de que se usara para reducir el déficit habitacional entre los miembros del Ejército. En 2010, el predio fue cedido al FOVIME por un valor de S/5.615.000, con el compromiso de cumplir esta misión. Sin embargo, en lugar de brindar más viviendas, la entidad comenzó a desalojar a los oficiales. Una de las razones del conflicto, es que nunca se inscribieron individualmente los chalets en los registros públicos en sus 60 años de existencia. Esto agravaría la situación legal de los ocupantes.
El FOVIME comenzó a desalojar a los oficiales de las viviendas. Foto: América TV.
Ante la amenaza de desalojo, los actuales habitantes de las casas exigen al FOVIME una opción de compra preferente, que les permita adquirir las viviendas que ocupan desde hace décadas. Sin embargo, el organismo se mantiene firme en su decisión de recuperar el terreno, iniciar un proceso de saneamiento legal y buscar una revalorización del predio. Esta situación ha generado malestar y preocupación entre las familias afectadas, que ven cómo sus hogares están a punto de ser arrebatados.
Las casas de San Isidro, según el portal Properaty, tienen un valor que oscila entre 420,000 y 750,000 dólares. Para ello, son considerados factores como ubicación, tamaño y estado de conservación son tomadas en cuenta para . Este elevado precio explica el interés por el predio, ubicado en una de las zonas más exclusivas de Lima.
Un terreno en San Isidro está valorizado entre 420,000 y 750,000 dólares. Foto: Google.
El Fondo de Vivienda Militar (FOVIME) fue creado con el objetivo de solucionar la falta de vivienda para sus aportantes mediante programas de vivienda y créditos hipotecarios. Sin embargo, su actuación en este caso ha generado cuestionamientos, al parecer más enfocado en el valor económico del terreno que en cumplir con su misión de mejorar la calidad de vida de las familias militares. El futuro de estas viviendas y de las familias que las habitan continúa en la incertidumbre, mientras el conflicto entre los ocupantes y el FOVIME se intensifica.