Los padres están para levantarnos cuando nos caemos y aconsejarnos sobre casi todo, y de alguna manera nunca les falta ni la sabiduría ni las bromas cursis. Los padres de Disney no son muy diferentes y, cuando se trata de cosas serias, son capaces de ponerse firmes por las razones correctas.
Algunos de ellos son serios, mientras que otros no siempre saben cómo conectar con sus hijos. No obstante, estos papás aman a su familia por igual. En ese sentido, te traemos algunos de los patriarcas más memorables que han desempeñado un papel importante en la vida de nuestros personajes favoritos.
Marlín es el padre de referencia de la paternidad sobreprotectora, y tiene razón para estar un poco preocupado por Nemo, sobre todo por el asunto de la barracuda. Además, debemos tener en cuenta que cruzó todo el océano para buscar a su hijo, mérito que sin duda le ha valido para ganarse el respeto de todos.
El rey de los dioses del Olimpo es bastante despreocupado, especialmente si tenemos en cuenta las responsabilidades que tiene, pero su ingenio no se interpone con su sabiduría cuando más se necesita. El poderoso Zeus es también un padre alentador, divertido e hilarante para Hércules, que lucha por guiar a su hijo en su retorno a casa.
No hay lugar a duda de que Mufasa nos enseña sobre la vida, el amor y la pérdida. Por supuesto, todos sabemos que renunció a su vida para salvar a Simba, y ese es el máximo sacrificio paterno. Incluso, aún después de fallecido, regresa para impartir sabiduría a su hijo.
El rey de los océanos es un poco intimidante. Su figura imponente combina perfectamente con el título que descansa sobre sus hombros, pero siempre tiene las mejores intenciones. A fin de cuentas, solo quiere que Ariel sea feliz. Cualquier padre que tome el lugar de su hija como parte de un malévolo contrato con la bruja del mar, y luego le ponga mágicamente unas piernas para que pueda estar con el amor de su vida, merece una medalla de oro.
El entrañable carpintero tenía tantas ganas de ser padre que construyó su propio hijo, y lo quería a pesar de que solo estaba hecho de madera. Cuando se enteró de que Pinocho tenía problemas, Geppetto salió a buscarlo. Al final tuvo una increíble recompensa: el títere se convirtió en un niño de verdad.
Pese a que Tiana perdió a esa importante figura paterna cuando era solo una niña, James inculca a su niña algunas de las lecciones más valiosas que un padre puede enseñar a una hija: que es especial, talentosa y amada. Aunque tiene un final triste, le da una base que le acompaña toda la vida.
Además de ser el más grande y más adorable papá oso de las princesas, el rey Fergus no se preocupa en absoluto por los estereotipos de género de su época. Le da a su pequeña un arco desde el principio para que pueda luchar, lo que hace a Mérida indescriptiblemente feliz.
El Sr. Increíble no es un padre y marido corriente. Su asombroso amor por sus hijos y su sólida relación con su esposa contribuyen a su éxito familiar: ambos se respetan mutuamente y comparten el crédito de manera equitativa.
El padre de Bella es probablemente uno de los papás más adorables de Disney. Sabe que la vida es mejor cuando no se presta atención a las situaciones negativas y continúa con su pasión de inventor, sin importar lo que la gente del pueblo piense de él.
Tiene un gran concepto de su hija y su trabajo como padre soltero es loable, pues ha criado a una joven segura de sí misma e independiente.
El respetado líder solo quiere lo mejor para su isla y su familia. Moana se parece mucho a su padre y tiene su mismo espíritu aventurero. Sin embargo, Tui se siente protector con su hija y no quiere que se haga daño viajando a través del océano, algo que él teme debido a una experiencia propia. No obstante, su valiente niña le permite recobrar su amor por el mar.