Este martes 6 de octubre de 2020, la Real Academia de Ciencias de Suecia anunció a Roger Penrose como uno de los ganadores del Premio Nobel de Física por descubrir la relación entre los agujeros negros y la teoría de la relatividad general del científico Albert Einstein. Al recibir dicho galardón, el británico de 89 años causó revuelo al afirmar la existencia de otro universo anterior al Big Bang. “Todavía se puede observar”, mencionó.
“El Big Bang no fue el comienzo. Había algo antes del Big Bang y ese algo es lo que tendremos en nuestro futuro”, expresó el catedrático emérito de la Universidad de Oxford en el Reino Unido.
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A lo que Roger Penrose se refería es a su estudio acerca de seis ‘puntos Hawking’ en el cielo —llamados así en honor al astrofísico Stephen Hawking—, cada uno con un tamaño aproximado de ocho veces el diámetro de la Luna, cuyos indicios se habían visto a través de BICEP2, un radiotelescopio del polo sur, por intermedio del Fondo Cósmico de Microondas.
Científicos de la Universidad de Oxford creen que estos círculos son los 'puntos Hawking', aunque otros sostienen que solo son curvaturas de luz | Foto: BICEP2/AN, MEISSNER, PENROSE.
En 1974, Hawking había propuesto que la radiación sí podía escapar de los agujeros negros (la llamaron ‘radiación de Hawking’) y, por tanto, estos objetos se evaporarían con el tiempo. Así es como Penrose apuesta por la existencia de agujeros negros ‘muertos’ que han dejado rastros ‘calientes’ de universos primigenios.
Mediante una entrevista desde su casa, cuenta el medio masivo The Telegraph, Roger Penrose confirmó la captación de ese tipo de ondas electromagnéticas. Sin embargo, según la revista Time de Estados Unidos, aún faltan detalles para identificar ‘La radiación de Hawking’ a ciencia cierta y eso “costará millones”. Una muestra de ello fue lo que sucedió en 2008: el Gran Colisionador de Hadrones (LHC por su siglas en inglés) no probó tales ideas con los experimentos.
“Tenemos un universo que se expande y se expande, y toda la masa se desintegra, y en esta loca teoría mía, ese futuro remoto se convierte en el Big Bang de otro eón”, acotó el ganador del Premio Nobel de Física 2020. Un eón se puede entender como un universo o ciclo diferente.
Anuncio del Premio Nobel de Física 2020 por el profesor Göran K. Hansson, Secretario General de la Real Academia de Ciencias de Suecia | Fotocaptura: nobelprize.org
En el resumen exhaustivo de la investigación titulada “Evidencia aparente de los puntos Hawking en el CMB Sky”, publicada el 18 de mayo de 2020 por Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, se lee: “Este artículo presenta una fuerte evidencia observacional de numerosos puntos circulares anómalos previamente no observados, de temperatura significativamente elevada, en el cielo de fondo de microondas cósmico”.
“La presencia significativa de estos puntos anómalos [...] (se confirmaron) ampliando la comparación a 10.000 simulaciones”, se agrega.
Poco después, los involucrados en el estudio científico —Daniel An, Krzysztof A Meissner, Paweł Nurowski y Roger Penrose— concluyeron que la existencia de los ‘puntos de Hawking’ es una consecuencia de la Cosmología Cíclica Conforme (CCC), modelo teórico de la relatividad general en el que se defiende que el universo es cíclico, es decir, se vuelve a crear cuando se consume.
A su vez, el Nobel de Física 2020, conforme a The Telegragh, recordó que hace muchos años los agujeros negros eran solo ficción, incluso Albert Einstein “los descartó como una curiosidad matemática”. El mismo caso parece estar sucediendo con los ‘puntos de Hawking’, una innovadora fuente de respuestas cosmológicas que estaría destinada a merecer reconocimiento de la comunidad científica, da a entender el experto del Reino Unido.
Se pudo detectar la luz cerca del horizonte de sucesos de un agujero negro | Foto: NASA
Los ‘puntos de Hawking’ son espirales de luz detectados en el Fondo Cósmico de Microondas, una radiación descubierta en 1965 que se expande por todo el universo.
El término se acuñó en honor al físico y divulgador científico Stephen Hawking, quien había dicho en 1974: “Los agujeros negros no son totalmente negros, sino que emiten partículas”.
Stephen Hawking siempre estuvo intrigado por el Big Bang y aseguraba que Dios no tenía lugar allí | Foto: National Geographic
A pesar de que una parte de la comunidad de la ciencia cree que estas fugas apreciadas son solo luz, Sir Roger Penrose asegura que se trata de la señal de un “eón anterior”.
Daniel An, coautor del estudio, apoya la idea de Penrose, según recogió la BBC: “Esos puntos no surgieron por casualidad, sino como consecuencia de algún fenómeno físico”.