El peruano que inició con un teclado y hoy tiene exitosa escuela de música con 4 sedes en Perú: ganó más de 150 premios
Un teclado obsequiado por su padre le cambió la vida para siempre y lo llevó a fundar su propia escuela en un pequeño salón en Tarapoto. Años más tarde, el proyecto fue creciendo hasta expandirse a la ciudad de Lima ¿Cómo lo hizo? En esta nota, te contamos su historia.
Dedicarse a la música como una carrera profesional suele ser, para muchos, sinónimo de inestabilidad y una baja rentabilidad en el Perú. Algunos consideran incluso que no se puede vivir de ella en el futuro y que son pocas las oportunidades que ofrece para el desarrollo personal y profesional. Sin embargo, el caso de Fidel Castro Moltaván, exalumno de la Universidad Nacional de Música, demuestra que esto es solo un mito.
El joven de 37 años llevó su pasión por la música a otro nivel y, con solo un teclado obsequiado por su padre durante la adolescencia, fundó una exitosa escuela de música que ha cosechado más de 150 premios tanto dentro como fuera del país. ¿Cómo lo hizo? En la siguiente nota, te contamos todos los detalles.
Fidel Castro Montalván cursó estudios en la Universidad Nacional de Música y hoy tiene su propia escuela con 4 sedes en Perú. Foto: IBP.
¿Quién es Fidel Castro, el peruano que hoy tiene una exitosa escuela de música con 4 sedes en Perú?
Fidel Castro Montalván nació en Lima, pero vivió gran parte de su vida en la ciudad de Tarapoto. Desde temprana edad, se sintió atraído por la música y, gracias a un teclado que le obsequió su padre, descubrió cuál era su verdadera vocación.
“Mi afición por la música comenzó aproximadamente a los 13 años, cuando mi papá me regala un teclado Casio que marcó el inicio de mi vida musical y me abrió las puertas a la música clásica, que años después estudiaría mucho. En ese teclado de S/ 400 o S/ 500, tenía música grabada y es ahí donde aprendía las canciones. En ese tiempo, no existía YouTube, entonces uno tenía que aprender solo”, comentó en entrevista con La República.
Si bien asegura que su padre no estaba ligado a este mundo, siempre le inculcó el gusto por la música clásica. Fue así que decidió comprarle aquel teclado que, sin pensarlo, cambiaría por completo su vida.
“Cuando era niño, veía algo con teclas blancas y negras, y me llamaba mucho la atención, me daba una especie de hipnosis. Yo le comenté eso a mi papá y él me apoyó regalándome un teclado. Un pequeño regalo me marcó la vida para siempre”, agregó.
Años más tarde, cuando cumplió 18, ingresó a la Universidad Nacional de Música, donde empezó a formarse de manera profesional. Para Fidel, el apoyo de sus padres fue fundamental para seguir este camino.
“Agradezco mucho el apoyo que recibí de mis padres porque desde un inicio aceptaron la iniciativa. Tenían la mente abierta, ya que eran educadores. Sabían que no solo se pueden estudiar las típicas carreras, sino también otras que nos pueden dar muchas satisfacciones, en este caso la música”, señaló.
Durante su época de estudiante, Castro Montalván obtuvo el primer puesto en el Concurso Nacional de Conciertos “Wolfgang Amadeus Mozart” (2006), y el segundo lugar en el Primer Concurso Nacional de Federico Chopin. Además, actuó como solista con la Orquesta Sinfónica de la Universidad Nacional de Música y, posteriormente, con la Orquesta Sinfónica Nacional.
Sus inicios como músico y cómo llegó a fundar su propia escuela
Tiempo después, tras perfeccionar su técnica y visionar sus metas a futuro, Fidel decidió que era el momento de compartir sus conocimientos con los nuevos talentos en el rubro.
Así, en 2014, empezó con un taller de música en un pequeño salón cedido por su padre en el Instituto Blaise Pascal, del cual es fundador, en la ciudad de Tarapoto. Con solo un teclado, que conservaba desde la adolescencia, recibió a sus primeros estudiantes.
“Empezamos con un aula pequeña que me facilitó mi papá. Ahí empecé a dar clases, justamente con el teclado que me regaló hace muchos años. En ese tiempo, simplemente decía por qué no enseñar, por qué no dar esa posibilidad a los estudiantes del instituto y por ahí al público externo que quiera estudiar teclado”, afirmó.
Poco a poco, fue ahorrando los ingresos que iba percibiendo y, con ello, adquirió algunos instrumentos. Incluso, cuenta como anécdota que, tras sufrir un accidente de tránsito que lo dejó con el brazo fracturado, utilizó una parte del dinero del seguro para seguir implementándose.
Si bien asegura que fue un proceso lento, el crecimiento fue sostenido con el tiempo hasta fundar lo que sería la primera sede de la Escuela de Música IBP en Tarapoto. El proyecto fue tan exitoso que, en el 2022, empezó su expansión a la ciudad de Lima.
“Decidimos ir a Lima porque es el centro de muchas cosas. Ahí se dan la mayoría de los conciertos de música en general y también de música clásica. Se dan bastante visitas de maestros a dar cursos porque es la capital. Hay muchos eventos académicos también, entonces vimos que era fundamental poder llegar ahí”, comentó.
Hoy, la Escuela de Música IBP cuenta con tres sedes en Lima: una en Jesús María, otra en Miraflores y una última inaugurada en San Miguel, que se suman a la matriz ubicada en Tarapoto. Según Castro Montalván, el concepto es el mismo en todos sus locales.
“Llevamos el concepto del piano hall, que es un aula con un vidrio. El público puede ver todas las clases y los recitales. Está justo frente a la calle. Entonces, uno puede observar que la música es accesible. Puedes ver que hay personas de la tercera edad, niños de todas las edades, jóvenes y adultos que están haciendo música”, resaltó.
La Escuela de Música IBP fue fundada hace 10 años en la ciudad de Tarapoto. Foto: IBP.
Más de 150 premios y dos estudiantes becados en el extranjero
El fundador del IBP revela que, gracias a la metodología aplicada en su escuela, basada en el trabajo por objetivos, y en la facilidad que otorgan a los estudiantes para practicar con sus instrumentos, han logrado cosechar más de 150 premios tanto en Perú como el extranjero.
Incluso, mencionó que dos de sus estudiantes, identificados como Bruno Ramírez (Tarapoto) y Juan Chávez (Huánuco), han logrado conseguir becas para estudiar la carrera profesional de piano en la Gulf Coast University de Florida. Este beneficio les asegura una cobertura total de vivienda y alimentación durante el tiempo que cursen sus estudios.
Dos estudiantes de la Escuela de Música IBP han ganado becas para estudiar en instituciones del extranjero. Foto: IBP.
¿La música es rentable en el Perú?
Castro Montalván asegura que estudiar Música en Perú es una excelente oportunidad para miles de personas que buscan vivir de su talento. Para él, esta carrera puede ser mucho más rentable que otras profesiones.
“Nosotros tenemos formadores que viven muy bien de la música porque ganan mucho más que el salario promedio de un oficinista que ha estudiado administración o contabilidad. Entonces, creo que la música nos da bastantes posibilidades de crecimiento. Hay un mercado que tiene mucha capacidad de expansión. Por tanto, considero que la música es una oportunidad, solo que por desconocimiento los jóvenes siempre buscan la opción más sencilla”, señaló.
Incluso, se animó a brindar algunos datos sobre el ingreso promedio que puede llegar a percibir un músico en Perú. “Yo tengo formadores en Tarapoto que trabajan medio tiempo, 24 horas semanales, y ganan S/1.500 a S/ 2.000 soles. Si trabajas a tiempo completo, ganas S/ 3.000 a S/ 4.000. En Lima ganas mucho más, S/6.000 o S/ 7.000. La música sí te da muchas posibilidades”, apuntó.