Sociedad

Virgen de Chapi: ¿cómo llegó a Arequipa y por qué es tan venerada?

Arequipa. El peregrinaje y la veneración religiosa por la festividad de la Virgen de Chapi convoca a miles de fieles arequipeños y turistas.

Virgen de Chapi venerada por sus fieles. Foto: La República/Archivo.
Virgen de Chapi venerada por sus fieles. Foto: La República/Archivo.

La Virgen de Chapi representa la fe de la región arequipeña. Su santuario ubicado en el distrito de Polobaya atrae a miles de fieles locales y turistas cada año. La Virgen es considerada la patrona de la ciudad de Arequipa y es venerada por los habitantes como protectora y guía en su vida diaria, pero ¿cuál es la verdadera historia detrás de esta figura sagrada y cómo llegó a su santuario actual?

Según la tradición oral, la imagen de la Virgen de Chapi fue encontrada en un lugar llamado Huancarqui, a unos 10 km al este de su santuario actual. Fue descubierto por un campesino llamado Miguelina en la década de 1780, mientras pastoreaba ovejas. La imagen fue descubierta dentro de una cueva y, según algunos relatos, se encontraba en malas condiciones. Miguelina llevó la imagen a su casa y la limpió, pero regresó misteriosamente a donde fue encontrada.

El evento se repitió varias veces y finalmente se decidió construir un santuario en el sitio donde se encontró la imagen por última vez. El santuario fue construido con la ayuda de los habitantes locales y se convirtió en un lugar de peregrinación popular en la región.

Sin embargo, esta versión ha sido objeto de debate entre los estudiosos y expertos en historia religiosa. Se ha argumentado que la historia de Miguelina y el hallazgo de la imagen es una leyenda popular y que la verdadera historia detrás de la Virgen de Chapi es mucho más compleja.

Según los registros históricos, la imagen de la Virgen de Chapi fue traída a Perú desde España en el siglo XVIII. No se sabe con certeza quién trajo la imagen, pero se cree que pudo haber sido un grupo de misioneros franciscanos o jesuitas que llegaron a la región en ese momento. La imagen fue venerada por los misioneros y sus seguidores locales, pero su culto no se hizo popular hasta varios años después.

El culto a la Virgen de Chapi se expandió lentamente en la región, pero fue a mediados del siglo XIX que se convirtió en un movimiento religioso importante. Durante este tiempo, se construyó el primer santuario de la Virgen de Chapi en el distrito de Polobaya. El santuario fue construido en una colina cerca del lugar donde se encontró la imagen y se convirtió en un lugar de peregrinación popular.

En la década de 1950, se decidió construir un nuevo santuario en el lugar donde se encuentra actualmente. El nuevo santuario fue diseñado por el arquitecto peruano Hugo Vargas y construido entre 1958 y 1961. El santuario actual es una impresionante estructura de piedra y hormigón que se encuentra en lo alto de una colina y ofrece vistas panorámicas de la región.

La construcción del nuevo santuario fue financiada por la población local, quienes recolectaron fondos a través de donaciones y eventos de recaudación. El santuario es ahora un importante destino turístico y religioso en la región, y atrae a miles de fieles.