Sociedad

Sigue el drama de los damnificados por las lluvias en Lambayeque

Muchos siguen ocupando viviendas inhabitables, soportando altas temperaturas y expuestos a nuevos desastres. Pobladores de Íllimo, Pacora y Mórrope piden no ser olvidados.


Pared de la casa de la familia Leyva Mondragón, del caserío Culpón Bajo, se desplomó. Foto: Clinton Medina/ La República
Pared de la casa de la familia Leyva Mondragón, del caserío Culpón Bajo, se desplomó. Foto: Clinton Medina/ La República

A casi 48 horas de la fuerte precipitación ocurrida en la región Lambayeque, entre el jueves 9 y viernes 10 de marzo, y que alcanzó a casi todos los 38 distritos de la jurisdicción, decenas de familias del distrito de Íllimo todavía viven en pésimas condiciones, según constató este diario ayer sábado 11 de marzo.

De acuerdo a testimonios recogidos y registros de fotografía, algunas familias permanecen en viviendas inhabitables, mientras que otras se han quedado en la calle, donde tienen que soportar altas temperaturas. Más triste es también ver a las familias que han perdido a sus animales de corral y chacras de cultivos.

“No hay apoyo todavía del gobierno, estuvimos esperando a la señora (Dina) Boluarte, pero no llegó”, dijo una madre de Íllimo entre lágrimas.

La familia Leyva Mondragón del caserío Culpón Bajo, en Íllimo, también comentó lo difícil que resulta vivir en su inmueble con un solo ambiente donde ha tenido que compartir su comedor con camas de dormir y dos corrales de cuyes.

“La verdad no sé qué está haciendo el gobierno por nosotros, parece que estamos abandonados totalmente”, lamentaron los integrantes de la referida familia.

“Sí tengo miedo (que la casa se caiga en cualquier momento), pero qué voy a hacer, no tengo a donde ir, mi otra casa se la llevó el río y yo soy un hombre enfermo”, lamentó otro morador del caserío Culpón Bajo.

En los sectores Cahuide, San Carranco y Marqués, en el distrito de Jayanca, por ejemplo, fuertemente impactado por la lluvia, el río Motupe continúa amenazando. Allí, los pobladores exigieron obras prevención a largo plazo en el afluente, así como apoyo para poder reconstruir sus viviendas perjudicadas.

Varias familias de diferentes caseríos del distrito de Mórrope también quedaron damnificados al perder sus viviendas por los efectos del río La Leche. La mayoría ahora permanece en albergues o carpas.

Más promesas

Ayer, luego de tres días de intensas lluvias que dejaron más de 12.000 damnificados en Lambayeque, la presidenta Dina Boluarte Zegarra y dos de sus ministros, Hania Pérez de Cuellar, de Vivienda, y Raúl Pérez Reyes, de la Producción, llegaron a esta localidad para anunciar acciones de respuesta y entregar 30 toneladas de bienes de ayuda.

"En este gobierno vamos a darle la solución para que el río La Leche encuentre su desfogue y, una vez que eso suceda, vamos a ir reconstruyendo aquello que se ha dañado. Hemos sobrevolado Mórrope, Pacora e Íllimo y es una tristeza y un dolor. Familias en mitad del lodo y cosechas de arroz inundadas. Inclusive, no se ve cuál es el cauce del río", señaló la presidenta ante la prensa.