Sociedad

Poder Judicial ordena a la Municipalidad de Lima reconstruir el muro de la iglesia San Francisco

Las obras en los exteriores del convento continúan paralizadas luego de que el PJ rechazara suspender la medida cautelar concedida a la orden franciscana, para detener los trabajos del municipio limeño.

Según el sacerdote, la Municipalidad de Lima no realizó los estudios para estos trabajos de recuperación. Foto: Carlos Feliz
Según el sacerdote, la Municipalidad de Lima no realizó los estudios para estos trabajos de recuperación. Foto: Carlos Feliz

Continúa la disputa entre la orden franciscana y la Municipalidad de Lima. El Tercer Juzgado Especializado en lo Constitucional de la Corte Superior de Justicia de Lima rechazó el pedido de la comuna limeña para que suspenda la medida cautelar concedida a los religiosos, en contra de las obras que la institución edil realizaba en la periferia del convento.

Esta situación se da, luego de que la Municipalidad de Lima iniciara los trabajos de peatonalización de las calles aledañas al Centro Histórico, entre las cuales se encuentra la Plazuela San Francisco. El 5 de febrero de este año, se procedió a retirar el cerco perimétrico de 145 metros, acción que no fue bien vista por la orden franciscana, por lo que comenzaron una demanda contra el municipio y el Ministerio de Cultura por dar la autorización.

Ahora, la entidad liderada por el alcalde Miguel Romero Sotelo, deberá reconstruir el muro que protegía el patrimonio cultural. “Hemos logrado que se restablezca el muro, pero que se haga con cuidado la intervención a la plazuela”, señaló Joseph Campos, abogado de la orden franciscana.

El motivo de la presentación de la medida cautelar, según señala el abogado, es que la obra no contaba con los expedientes necesarios para certificar que, en el subsuelo del antiguo terreno, haya restos arqueológicos virreinales.

“Han estado realizando acciones sin estudios de impacto patrimonial, y como lo acreditamos, sin plan de monitoreo arqueológico.

Por su parte, el representante de Prolima, aseguró que el plan de monitoreo arqueológico se hizo durante la obra, tal como señala la norma. “Después de la autorización del Ministerio de Cultura, se tiene que dar un plan de monitoreo arqueológico (…). En el plan no se ha encontrado nada, salvo los cantos rodados del siglo XIX”, precisó el gerente Luis Bogdanovich Mendoza, en diálogo con Latina.