Arequipa: utilizan dron para dejar un paquete de cigarros en penal de Socabaya
Caso se encuentra en investigación. Fiscal penal, Carlos Alberto Arias Lovon , señaló que las personas que ingresen objetos prohibidos al penal podrían recibir hasta 20 años de prisión.
El fiscal adjunto al provincial, Carlos Alberto Arias Lovon, informó que la semana pasada personas utilizaron un dron para dejar un paquete de cigarros en el penal de Socabaya, en Arequipa. A raíz del hecho, refirió que aquellos ciudadanos que ingresen objetos prohibidos a los establecimientos penitenciarios podrían afrontar hasta 20 años de cárcel.
Otro caso suscitado es el intento de ingreso de chips de celulares escondidos en plátanos y mandarinas. Ambos acontecimientos se encuentran en investigación.
La información fue brindada por el fiscal Arias en una charla sobre el tema dirigida a los familiares de los internos del penal de Socabaya y organizada por el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe).
El fiscal precisó que el ingreso de equipos o sistemas comunicación, fotografía o grabación puede ser sancionado desde los cuatro a seis años de cárcel. Sin embargo, si el delito lo comete un agente penitenciario, abogado defensor o servidor público, la pena no es menor de seis ni mayor de ochos de prisión y sería inhabilitado del cargo.
También, por materiales o herramientas para construir antenas, receptores u otros equipos de comunicación que faciliten el contacto vía celular, fijos, radial, internet y de más; la pena se encuentra entre los dos y cuatro años. Si es menor de edad, autoridad o abogado, entre tres y seis de pena privativa de la libertad.
En el supuesto que sea un arma blanca o de fuego, municiones, materiales explosivos, inflamables, tóxicos, asfixiantes para uso del interno, la sanción va desde los ocho hasta los quince años y de diez a veinte si hay agravantes.
Reinicio de visitas en penales
Desde el último de 4 diciembre, se reanudaron las visitas presenciales a los establecimientos penitenciarios del país, luego que fueron suspendidas el 18 de marzo del 2020, como una acción preventiva para proteger la salud de los albergados/as y servidores debido a la COVID-19.