Sociedad

Universidades particulares: conflictos por educación virtual y pago de pensiones

QUEJAS Y RESPUESTAS. La educación a distancia es una opción durante la cuarentena. Estudiantes y padres no están muy convencidos del servicio. Además de la escasez de dinero, consideran que no se puede seguir pagando lo mismo. Las casas de estudios han intentado ceder en algunos puntos.

Descontento. Padres de familia de la Universidad Católica San Pablo se quejan de la manera en que clases virtuales se imparten.
Descontento. Padres de familia de la Universidad Católica San Pablo se quejan de la manera en que clases virtuales se imparten.

Fiorella Montaño

Arequipa

Algunas universidades particulares iniciaron sus actividades académicas vía la enseñanza virtual. Un sector de padres y estudiantes no está convencido de la efectividad de este servicio. Con la situación de emergencia, la economía de cientos de familias se precarizó y no tienen cómo asumir el pago de pensiones de sus hijos. En el otro lado, figuran los argumentos de colegios y universidades. Que ellos invirtieron para trasladar su propuesta educativa al mundo virtual y que deben pagar planilla de docentes y personal administrativo.

En Arequipa funcionan más de 7 universidades, de ellas 3 privadas optaron por las clases de manera virtual: la Universidad Católica de Santa María, Católica San Pablo y La Salle. Empezaron en abril. Otras esperan el término del estado de emergencia.

La Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) emitió una directiva sobre las labores virtuales (ver despiece); pero no se pronunció sobre pensiones, tampoco el gobierno.

Quejas públicas

A través de comunicados, los universitarios expresaron malestar por la modalidad virtual y el pago de pensiones. Los de la Católica Santa María solicitaron un descuento de 50% o 40% en las pensiones. Argumentan que el modo virtual ahorra costos: luz, internet, agua, entre otros. No quieren pagar la primera cuota, pues no hubo actividades en marzo, a mediados de ese mes comenzó la cuarentena. También se quejan de sus docentes. Sostienen que estos no se adecúan a los medios virtuales. “Como alumnos tratamos de apoyarlos, lo que no entendemos es que muchos de nuestros catedráticos cancelan sus clases, nos proyectan grabaciones de clases o simplemente se dedican a dejarnos tarea”, se lee en su pronunciamiento.

También hubo quejas contra la Universidad Católica San Pablo. Mediante una carta pública, un grupo de padres de familia señaló que se les remitió un cronograma del pago de pensiones sin descuentos.

Cuestionan el desarrollo de las sesiones virtuales. Ponen el ejemplo de un alumno de primer año de la carrera de Administración de Negocios. Este recibe clases por las mañanas, pero algunos profesores les piden conectarse al aula virtual por las noches, para continuar por 2 o 3 horas extras. Algunos llaman por teléfono.

La respuesta

Ante estos pronunciamientos públicos, las universidades dieron su versión.

La Católica de Santa María explicó que si bien redujeron algunos gastos, se han creado otros, como la compra de equipos de bioseguridad, la adquisición de un mayor ancho de banda y el desarrollo de la plataforma web. Para aquellos que paguen a tiempo se ha previsto el descuento del 15% de las pensiones. Para quienes no puedan abonar a tiempo no habrá recargo de moras ni gastos administrativos. En casos extremos de insolvencia económica, el estudiante debe recurrir al área de servicio social, contactarse con el correo abegazo@ucsm.edu.pe. La UCSP indicó que si un alumno no puede pagar la pensión, no perderá el año. Están subvencionando de forma parcial a 1 600 alumnos, además del pago de internet para otros 200.

Casas superiores deben garantizar recuperación

Sunedu es la entidad encargada de evaluar la calidad de la enseñanza realizada durante este periodo. El desarrollo de esta actividad durante la emergencia tiene que estar enmarcado en varias pautas.

La superintendencia es clara en indicar que la modalidad virtual no se puede extender más que el estado de emergencia. Las universidades deben presentar un cronograma de recuperación de labores a Sunedu, esta entidad verificará que se cumpla. Caso contrario, se realizará la denuncia ante Indecopi.

Las universidades que realicen clases a distancia deberán asegurar su conectividad y el soporte necesario para el funcionamiento de su plataforma virtual. Las universidades deberán adoptar medidas para mitigar las brechas generadas por el acceso desigual a recursos virtuales.

Se necesita gran inversión

Gonzalo Banda

Catedrático universitario

Estoy dictando clases virtuales en 2 universidades y utilizo un aula virtual desde hace 7 u 8 años, pero nunca se utilizó con la extensión de hoy. El proceso de virtualización ya lleva varios años. Hay universidades que ofrecen modalidades de estudio casi a distancia. En Arequipa muchas universidades ya estuvieron preparadas en cuanto a la plataforma, pero lo que sucedió es que los servidores y plataformas fueron insuficientes para atender la magnitud de la demanda. Han tenido que realizar fuerte inversión en servidores y personal. No es tan simple como decir que hay internet y que por eso ya se puede realizar clases virtuales.

Nunca en mi vida trabajé tanto para preparar clases, porque debido a la emergencia, se tuvo que rediseñar todo el material en unas pocas semanas. Para los mayores debe ser más desafiante. Algo que también se ve es que los alumnos preguntan más que en las aulas.