Sociedad

La urgencia de un nuevo Jorge Chávez

Panorama. Un alto funcionario que labora en nuestro primer aeropuerto afirma: “No se puede esperar más tiempo, es urgente la ampliación y nuevos cambios. En un recorrido por las horas punta se observa mucho tráfico de personas y necesidades”. LAP enumera sus progresos y asegura que avanza, al mismo tiempo, con el plan de ampliación. El 2022 debe estar lista la segunda pista y el 2024, el nuevo terminal.

Por: Carlos Páucar, María Ponce

Amelia Corzo Linares, de 55 años, viene de Italia, donde trabaja de enfermera hace ya más de 20 años. Ha vuelto al Perú para ver a la familia y reencontrarse con sus amigos del colegio. Dice que el mayor peligro de llegar al aeropuerto Jorge Chávez es que le cancelen su vuelo, las horas de espera y el tiempo que se pierde desde que aterriza el avión hasta que sale del terminal aéreo.

Una ciudadana chilena también nos comenta que debería haber asientos para los pasajeros en tránsito y señala a varias personas que están esperando en los pasillos o en el piso. Otro usuario consultado pide que se cumpla la hora de llegada de los vuelos. Al oírlo, una mujer cuenta a La República que lo preocupante son los “excesos a la hora de abordar el avión”. Piden, incluso, sacarse ciertas prendas. “A las damas les revisan hasta los hombros y a los hombres les hacen sacar abrigos, hasta las medias”, relata.

En lo que coinciden la mayoría de usuarios del aeropuerto Jorge Chávez es en el acoso de taxistas y el comercio ambulatorio en las salidas del terminal. Un desorden preocupante.

Precisamente, el viernes último, personal de seguridad del aeropuerto, Mincetur, Ministerio de Transportes, Policía de Tránsito y de la Policía de Turismo, Municipalidad del Callao, realizaron un operativo conjunto contra la proliferación de taxis informales. “Es injusto este caos para el turista, para el que llega acá”, comenta el coronel PNP Lazarte, uno de los que dirige la acción, mientras el personal verifica licencias y revisiones técnicas de cada vehículo en una salida del aeropuerto.

“Los taxistas informales son un problema desde hace tiempo y de esto no se salva el Jorge Chávez”, refiere el comisario del terminal, comandante PNP Alfredo Morante, mientras a un lado están los famosos “jaladores”. Si bien es cierto, en el interior del terminal hay empresas registradas, en las afueras de las salidas de embarque 4 y 5 se puede observar a choferes que ofrecen taxi. Algunos declaran tener permiso de la Municipalidad Provincial del Callao.

Evidente colapso

En realidad, el terminal aéreo no se abastece para los más de 23 millones de pasajeros que recibe al año. Las colas se repiten a diario. Es más, llegar al Jorge Chávez ya es una tarea titánica. La congestión en las avenidas Faucett, Tomás Valle y otras vías de acceso no se detiene. La proliferación de taxis informales, de transporte público, las vías en mal estado, el aumento de “jaladores” y vendedores ambulantes resulta en un caos, sobre todo en horas punta.

Cualquier proyecto de ampliación se topará con este enorme enredo vehicular en las afueras del Jorge Chávez.

Un funcionario aeroportuario, que pide no ser identificado, opina que no se puede esperar más tiempo, es urgente la ampliación y nuevos cambios. “Hay momentos, como ahora lo están viendo, que ni se puede caminar por los pasillos. A eso de las 11:00 p.m. se juntan unos doce vuelos, con 300 pasajeros cada uno. Imagínese las colas en Migraciones”, refiere.

Opina que Lima Airport Partners (LAP), empresa operadora del Jorge Chávez, privilegia una visión muy comercial. “Busca llenarlo de locales comerciales y la muestra es que cada vez los counter en el primer nivel están más pequeños, y tratan de meter más. Mire las oficinas policiales, reducidas, mientras hay más comercios. Además, hay más restricciones, que empequeñecen espacios”.

Un oficial PNP igual muestra su preocupación por las zonas restringidas que dificultan la labor de las unidades en el terminal (Dirandro, Policía Fiscal, de extranjería, requisitorias, de inteligencia, Udex, Dircote, etc.) y en la que se exige “mucho protocolo” por parte de LAP para ver quién accede a cada espacio, bajo amenaza de sanciones.

Y critica que falte personal en áreas importantes, como en la llamada La Siberia, lugar donde las maletas hacen su recorrido; que los escáneres de control no tengan mantenimiento; que haya solo un fiscal antidrogas asignado al aeropuerto y no un fiscal en lo penal; y que no se pueda determinar allí si se ha producido la ingesta de elementos extraños al cuerpo, se debe conducir al sospechoso a un hospital.

“No hay control total de civiles en zonas sensibles del aeropuerto –dice un trabajador–. En La Siberia, 70 personas ven maletas. ¿Quién controla eso?”.

Cambios que se vienen

La esperanza es, por eso, el proyecto de ampliación del aeropuerto internacional Jorge Chávez. Su director, Anton Aramayo, anunció antes que Lima tendrá al 2024 uno de los aeropuertos más grandes y modernos de Sudamérica.

En respuesta a La República, LAP sostiene que trabaja en el proyecto de ampliación con “el compromiso con el Estado peruano de cumplir el cronograma establecido”. Los plazos ya se habían anunciado: en octubre del 2022 se entregará la segunda pista y en octubre del 2024, el nuevo terminal.

LAP refiere que son tres las etapas de trabajo. La primera, en ejecución, es el movimiento de tierras, demoliciones de estructuras y retiro de escombros. “Se han empezado con las demoliciones, se removerán cerca de 2 millones de metros cúbicos de material en total con actividades de relleno de más de 130 mil metros cúbicos, para preparar el área de construcción”, explicaron. LAP informa que se trabaja en la base de la nueva torre de control. Se instalan 33 cimientos.

La etapa 2 corresponde a la edificación de la nueva torre de control, la construcción de la segunda pista de aterrizaje, las calles de rodaje y la plataforma avanzada de aeronaves. Y la etapa 3 incluye el terminal y los edificios de soporte.

Para LAP, este es “un proyecto de alta complejidad, la más alta inversión en infraestructura aeroportuaria en el país”.

Así sea. Mientras tanto, se necesita con urgencia soluciones a los problemas de nuestro aeropuerto internacional.

Las cifras

2001 se firmó la concesión del Estado con LAP por un lapso de 30 años.

2024 se anuncia el traslado de las actuales instalaciones a la nueva sede.

1.500 millones de dólares se invertirán en ampliar las actuales instalaciones.

98 sedes comerciales el 2018. Y 192.695 movimientos de aeronaves.

LAP: “Ya recibimos a 23,6 millones de pasajeros”

1) Las respuestas de LAP. Según el último informe de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), publicado este año por encargo de Ositrán, se identificaron niveles óptimos en el departure hall (zona de salidas), salas de esperas de vuelos internacionales, control de aduanas, control de boarding pass (molinetes), llegada de vuelos domésticos e internacionales y controles de seguridad, etc.

2) Avances. En LAP: A) Coordinamos con las aerolíneas para mejorar la atención al usuario en el check-in nacional. Se aumentaron 18 posiciones de atención y una máquina de rayos X para equipajes dimensionados, aumentando la capacidad en un 15%. B) Ampliamos la zona de llegadas nacionales y se implementó dos fajas de recojo de equipajes adicionales. C) El año pasado inauguramos 5 nuevas salas de embarque remotas para vuelos domésticos, con una inversión de US$ 3.5 millones. D) Este año inauguramos 8 nuevas posiciones de estacionamiento de aeronaves (PEA), pasando de 52 a 60. Esta mejora permite hasta 28 vuelos diarios adicionales. E) Se incrementó 4 controles boarding pass y 2 arcos de seguridad para dar más fluidez al tránsito de personas. F) Se aumentó la flota de buses para trasladar a pasajeros de las aeronaves al terminal y viceversa.

3) Atención. El 2019 recibimos 23.6 millones de pasajeros gracias a los trabajos de mejora. Labor que desarrollaremos al 2024, lo que permitirá cubrir la demanda de pasajeros hasta cuando funcione el nuevo aeropuerto.

4) Mejoras. Para este 2020 se ejecutarán: A) En el check-in se implementarán las islas de pesado y repacking, evitará que los pasajeros realicen la apertura de sus maletas en el proceso, agilizando todo. B)En coordinación con las aerolíneas se trabaja un plan de mejora a través de procesos tecnológicos como la inclusión de posiciones de self bag drop. C) La inclusión de pedestales para doble lectura en salas de embarque, lo que permitirá embarcar el vuelo con dos filas en paralelo, haciendo más ágil este proceso. D)Se ampliarán las áreas de servicios higiénicos para pasajeros en la zona pública del terminal.

5) Planes. Para el 2021 en adelante, contemplamos: A) Incrementar controles boarding pass, arcos de seguridad y área de cola para ambos procesos. B) Habilitación de 590 metros cuadrados en áreas de espera para pasajeros en salas remotas nacionales. C)La construcción de la plataforma avanzada, la cual permitirá un incremento de posiciones de estacionamiento de aeronaves adicionales (PEA).