Alerta. Psicóloga afirma que depresión severa puede llevar a autoeliminarse. Y el 20% de estas personas deja misivas.,Suicida dejó carta pidiendo perdón a sus seres queridos,Wilson Aranda Trujillo La joven Steffany Cristell Espinoza Ruiz (23), quien se quitó la vida arrojándose del sétimo piso de la Facultad de Medicina de la Universidad Particular Antenor Orrego (UPAO), lo tenía todo planeado. Ello se evidencia en la carta que dejó pidiendo perdón a sus seres queridos por la fatal decisión. “Mami, perdón por no lograr tus metas, en estos momentos estoy logrando lo que siempre quise, ya no estar aquí, vende todo lo que gané con mis malas decisiones, sal de esa casa y quiere mucho a Kisha, la voy a extrañar”, empieza el manuscrito hallado entre sus pertenencias. A su pareja le dice: “Maiko, adiós. No es por tí todo este show, es porque ya estaba previsto y te lo había contado varias veces, te amo”. Pero el párrafo más terrible es quizá aquel en donde la joven cree estar en un callejón sin salida y solo la muerte la podría liberar: “Iván, cholo, perdón. No puedo y no por decepción, sino porque esta vida al final tenga lo que tenga, no vale nada”, le refiere a quien sería uno de sus mejores amigos. La psicóloga Mirtha Fernández Mantilla señaló que a nivel mundial, un 20% de suicidas deja una carta. La profesional también criticó que se haya difundido videos de la caída misma de Steffany como si fuera una película de estreno. “Eso ha estimulado el morbo y debe hacernos reflexionar de cómo estamos en salud mental a nivel de población”, indicó. Fernández aseveró que la suicida había ido acumulando tristeza que pasó a depresión severa, por eso dice: “esta vida al final tenga lo que tenga, no vale nada”.