Política

Masacre de Cayara: testigos acusan a militares

Hoy dictan sentencia. Familiares de víctimas y soldados de la patrulla confirmaron que efectivos del Ejército asesinaron a cerca de 40 comuneros en mayo y junio de 1988.

No se rinden. Más de 30 años después, los familiares de las víctimas de Cayara siguen buscando justicia. Esperan que se condene a los responsables.. Foto: difusión
No se rinden. Más de 30 años después, los familiares de las víctimas de Cayara siguen buscando justicia. Esperan que se condene a los responsables.. Foto: difusión

Tras muchos años de espera, los familiares de los comuneros asesinados en Cayara en mayo y junio de 1988, esperan al fin encontrar justicia. Esta tarde la Sala dictará sentencia en el proceso contra el exjefe político militar de Ayacucho, general José Valdivia Dueñas, entre otros militares, por las ejecuciones extrajudiciales de cerca de 40 personas.

Durante el proceso quedó plenamente establecido que el 13 de mayo de 1988 se produjo una emboscada terrorista a un convoy del Ejército en la zona de Erusco, muy cerca a Cayara, que tuvo un saldo de 4 efectivos militares asesinados. Como respuesta, la 2da División del Ejército de Ayacucho, liderada por Valdivia Dueñas, ejecutó el plan Persecución, en la que participaron patrullas de diferentes bases.

En el proceso, los militares aceptaron haber ido a Cayara y lugares aledaños, pero negaron haber cometido los crímenes. Aseguraron que al llegar todos estaban muertos y responsabilizaron a los terroristas.

Testimonios de familiares de las víctimas e incluso de miembros de la patrulla contradicen esa versión.

Uno de ellos es el soldado Orestes Cerna Arias, que integró la patrulla Grass. En su declaración instructiva relató que al llegar a Cayara asesinaron a un campesino que encontraron en el camino. Se trataba de Máximo Asto Palomino.

“Fue el teniente ‘Grass’ el que directamente mató a ese hombre; este hombre venía caminando por la carretera solo y este poblador choca con la patrulla, pasa por donde caminamos, él venía en sentido contrario, él salía del pueblo y nosotros ingresamos al pueblo y en ese momento el teniente le agarró, le rodeó por el cuello con los brazos y le disparó, me parece que fue por la cabeza”, declaró.

Al llegar a Cayara encontraron algunos pobladores desarmando el anda de la Virgen, cuya fiesta había sido el día anterior.

Los militares ingresaron a las casas buscando a las autoridades, y sacaron algunos pobladores, a quienes llevaron a la plaza y a la iglesia.

El soldado Cerna Arias contó que le ordenaron dar seguridad afuera del templo, desde donde escuchó disparos y gritos.

“El teniente ingresa a la iglesia, primeramente clasificaba a la gente en el interior, sé que algunas personas después de interrogarlas las han soltado, pero yo no he visto cuántas han sido porque yo estaba hacia un costado fuera de la iglesia. Luego se han escuchado disparos, luego de eso el oficial ha salido de la iglesia y nos ha ordenado bajar a la quebrada”, indicó.

Allí también estaba la patrulla Algarrobo y también asesinaron más pobladores.

“El teniente ordenó que todos los varones se quedaran y que las mujeres se fueran y que salieran sin dar vuelta... Los que estaban bajo las órdenes de los tenientes dispararon al aire para que las mujeres salgan corriendo. Recuerdo que a los varones los han puesto tendidos al suelo boca abajo, el teniente en ese momento ordenó se elimine a esa gente”, reveló.

Asesinan también a los testigos

La abogada de Aprodeh, Gloria Cano, expuso que testigos de la masacre presentaron una denuncia en Huamanga, y luego fueron asesinados. Recordó que después de eso el general Valdivia fue a Cayara con una lista de presuntos terroristas o eran colaboradores de Sendero Luminoso

“Después de eso comienzan a desaparecer las personas de esa lista. Desaparecen entre el 28 y 29 de junio, cuando ya estaba la base militar en Cayara”, refirió. Luego fueron asesinados el alcalde y su secretaria.