Política

Contrabando electoral del Congreso en manos del primer ministro Gustavo Adrianzén

Demanda. Presidente del JNE le solicita al primer ministro que observe las modificaciones a las normas electorales aprobadas por el Legislativo, que implican un retroceso en la paridad y alternancia, en la participación de militantes, entre otros.

¿Le hará caso? El presidente del JNE, Jorge Salas, le pidió al primer ministro, Gustavo Adrianzén, observar el dictamen.
¿Le hará caso? El presidente del JNE, Jorge Salas, le pidió al primer ministro, Gustavo Adrianzén, observar el dictamen.

Ayer el presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Luis Salas Arenas, envió un oficio al primer ministro, Gustavo Adrianzén, para solicitarle que observe las modificaciones a las leyes electorales aprobadas a modo de contrabando en el Congreso.

El pedido se debe a que las iniciativas de ley que había presentado el JNE a fin de aplicarlas en las elecciones generales, regionales y municipales del 2026 fueron trastocadas en el Parlamento.

Las contrarreformas incluidas sin tomar en cuenta la opinión de los organismos electorales incluyen retrocesos en la paridad y alternancia, el derecho a participación de los militantes, incongruencias en los requisitos para postular, flexibilización de las sanciones contra los partidos políticos e incremento de requisitos para que los movimientos regionales sobrevivan.

Primero, porque tales contrarreformas atentan contra la paridad y alternancia al no exigirlas en las fórmulas presidenciales y de Gobiernos regionales. Segundo, porque establece que en los comicios primarios las organizaciones políticas puedan elegir a sus candidatos a través de listas. Esto, según la carta del JNE, atenta contra el derecho a la participación individual de los militantes.

Tercero, estas modificaciones establecen que el proceso electoral de los comicios generales del 2026 se convoquen, mínimo, con un año de anticipación.

Y, a su vez, dispone que el 12 de julio de este año sea la fecha tope para que un ciudadano se afilie a una organización política y así pueda participar en los comicios 2026. Para el JNE, la incongruencia en este punto radica en que esta disposición exige que los candidatos tengan un año de afiliación a un partido antes de la convocatoria al proceso electoral. Bajo esa premisa, le recalcó Jorge Salas Arenas, el plazo para afiliarse a una agrupación no sería julio de este año, sino que habría vencido en abril.

Doble rasero

Otra modificación controversial es la flexibilización de los requisitos para que los partidos no reciban sanciones.

En procesos pasados, cuando dos partidos suscribían alianzas electorales, la valla electoral era de 6%. El Congreso la ha bajado a 5%. En cambio, a los movimientos regionales los obligan a obtener el 10% de votos en la circunscripción donde participan. Antes ese requisito era de 8%.

Eliminan movimientos

Cabe precisar que esos cambios se aprobaron el 15 de mayo. Con esas disposiciones los actuales congresistas, además de postular a la reelección como diputados o senadores, en caso no sea electos, podrán postular ese mismo año a ser alcaldes o gobernadores.

Ahora el régimen de Dina Boluarte tendrá que tomar una decisión: hacer caso a las observaciones del máximo tribunal electoral o proceder como mesa partes de sus aliados del Parlamento y promulgar la norma.

Protesta del JNE

Además, el Pleno del JNE se pronunció contra la contrarreforma aprobada el jueves por el Legislativo para la reelección de alcaldes y gobernadores. Y es que el fujimorismo incluyó a última hora, en dicha norma, la eliminación de los movimientos regionales. Es decir, las autoridades que postulen solo podrán hacerlo a través de partidos políticos.

La eliminación de los movimientos regionales supone una afectación injustificada al ejercicio del derecho a la participación política”, dice el comunicado del Pleno del JNE.

Como se trata de una reforma constitucional, falta que el texto sustitutorio sea votado por el Pleno en la siguiente legislatura y obtenga no menos de 87 votos. Así el fujimorismo y sus aliados maniobran la legislación electoral, frente al silencio de la mandataria.

La carta de Jorge Luis Salas Arenas enviada a Gustavo Adrianzén