Política

Los cambios en la Comisión de Ética demoran procesos a los congresistas

Pendiente. Se espera ratificación en el pleno. Sánchez impulsaría procesos a fujimoristas por contratos a sus familiares.

Janet Sánchez
Janet Sánchez

Por: David Pereda Z.

Las controversias sobre la Comisión de Ética del Congreso impiden que se inicien ya investigaciones a los congresistas fujimoristas que contrataron a familiares de sus compañeros Federico Pariona, Segundo Tapia y Elard Melgar, y al apepista exfujimorista Mario Castro, que cobró por días de representación en su región cuando estaba en Lima, incluso en el gimnasio.

En el Parlamento, la Junta de Portavoces llegó a una decisión sobre la presidencia de este grupo de trabajo a fines de la semana pasada. La congresista Janet Sánchez, de Contigo, alegaba que le correspondía seguir en el cargo porque el acuerdo por el que juró era por dos años pero algunas bancadas no confían en ella por su presunto acercamiento al fujimorismo. Fuerza Popular, que recuperó esta comisión, decidió ratificar a Sánchez a la cabeza del grupo.

Además, en esta sesión de la Junta de Portavoces se decidió por mayoría que la comisión aumente a 19 integrantes: ocho de Fuerza Popular y uno por cada una de las otras bancadas. Falta que el pleno del Congreso ratifique esta recomposición de este importante grupo de trabajo.

Sánchez planteará que la Comisión de Ética procese a los congresistas fujimoristas Pariona, Tapia y Melgar por las contrataciones de sus familiares, y al apepista Castro, “ampayado” en un gimnasio en Lima cuando debía estar trabajando en Amazonas, según comentó la propia parlamentaria a La República.

Sin embargo, el fujimorismo y los grupos que tiene como aliados en la Mesa Directiva, Acción Republicana, Contigo y Cambio 21, hacen mayoría en Ética, al sumar 11 votos de un total de 19.

Luego de que el pleno ratifique la recomposición de Ética, recién este grupo empezará a sesionar. El fujimorismo y sus aliados serán un factor clave. Hay informes ya casi listos en este grupo de trabajo que chocan con sus intereses, como el caso del ‘naranja’ Héctor Becerril, según fuentes congresales. A esto se suman los nuevos casos recién revelados por la prensa.