Hinostroza se habría visto con Héctor Becerril en casa del empresario Antonio Camayo para coordinar la cita con Fujimori,La guerra declarada entre Martín Vizcarra y Keiko Fujimori acaparará nuestra atención durante las próximas semanas. Con ambas partes peleando por su supervivencia, veremos un recrudecimiento de las estrategias que se han perfilado en estos días, con ataques de toda calaña, golpes bajos, avances y retrocesos. Pero este pleito en las alturas de nuestra política no debe distraernos de otro frente abierto. Con la publicación de las colaboraciones eficaces, la temperatura del caso Lava Juez ha subido varios grados. Ahora comenzamos a conocer la estructura de la organización dedicada a la corrupción, el acomodo y la maniobra política conocida como «Los cuellos blancos del puerto». En este organigrama aparecen varios altos funcionarios, entre jueces y fiscales supremos y miembros del Consejo Nacional de la Magistratura. Los testimonios han ubicado dentro de él al mismísimo fiscal de la Nación, Pedro Chávarry. Con la avalancha de cuestionamientos que afronta, su permanencia en el cargo es una verdadera vergüenza nacional. Junto a Chávarry aparece el ex fiscal supremo de Control Interno, Víctor Raúl Rodríguez Monteza, quien según dos colaboradores eficaces filtró información para poner sobre aviso de las investigaciones a Walter Ríos y César Hinostroza. Rodríguez Monteza es el mismo fiscal que emitió una orden para que IDL-Reporteros y Panorama entregaran sus audios y delataran a sus fuentes, que debió dejar el caso cuando se publicó una conversación suya con Mario Mendoza y que con su apoyo en la Junta de Fiscales Supremos permitió la permanencia de Pedro Chávarry como Fiscal de la Nación. En la cúspide de este entramado estaba el juez supremo César Hinostroza Pariachi. A pesar de su papel protagónico, de las actuaciones que le hemos escuchado —alguna tan abyecta como ofrecerse a apoyar al violador de una niña de once años—, de que han pasado cincuenta días desde las primeras denuncias, Hinostroza mantiene su inmunidad. Esta suerte se la debe a la inactividad del Congreso, que hasta ahora no debate las acusaciones constitucionales que penden sobre su cuello. La explicación para este trato tan generoso puede estar en otra revelación hecha por un colaborador eficaz del caso, quien asegura que Hinostroza efectivamente se reunió con Keiko Fujimori, quien sería la misteriosa «Señora K» de «La Fuerza Nº 1» del audio que a mediados de julio reveló «Panorama». Hinostroza se habría visto con Héctor Becerril en casa del empresario Antonio Camayo para coordinar la cita con Fujimori. Esta se produjo finalmente donde la lideresa de Fuerza Popular. La justicia lleva un rato marcando los tiempos de nuestra política. Desde la explosión del caso Odebrecht hasta la irrupción de los audios del caso Lava Juez, las investigaciones por corrupción han señalado a nuestra clase dirigente, definiendo una parte sustancial de su agenda. Están en el origen de la pelea que sostienen el Presidente y la lideresa de Fuerza Popular y pueden llegar a definir al ganador de la misma.