El presidente chino, Hu Jintao, aseguró que la principal prioridad de la agenda económica de China para el 2009 será garantizar un desarrollo estable y relativamente rápido para contrarrestar la crisis global. El mandatario se reunió con representantes de diversos sectores y de otros partidos políticos para escuchar sus opiniones sobre el camino de desarrollo económico de la nación asiática en las actuales circunstancias. A pesar de la influencia negativa de la recesión en Estados Unidos, Europa y Japón, Hu aseguró que su país garantizará un crecimiento sano y sostenible haciendo hincapié tanto en la calidad como en la eficiencia. En el tercer trimestre de 2008 el Producto Interno Bruto (PIB) chino aumentó en nueve por ciento, cifra que envidiaría muchos países, pero que es la más baja de la nación asiática en los últimos cinco años. Ello se debe al impacto de la reducción de las importaciones por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, que son los principales destinos de los productos chinos. El jefe de Estado destacó ante sus interlocutores la importancia de incrementar la demanda interna. También explicó el cambio de una política monetaria restrictiva a principios de año a la adoptada para el próximo año, que se caracteriza por lo que calificó como flexibilidad moderada, indicó Prensa Latina.
