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El país de América Latina con mejor inversion extranjera: supera a Corea del Sur

El mejor de América Latina. Esta nación se posiciona en el puesto 19 del ranking mundial y, además, se consolida como la quinta mejor economía emergente

Una nación sudamericana se posiciona entre las mejores el mundo como destino de inversión extrannjera, según datos de Kearney. Foto: composición LR/iStock/Pixibay
Una nación sudamericana se posiciona entre las mejores el mundo como destino de inversión extrannjera, según datos de Kearney. Foto: composición LR/iStock/Pixibay

La consultora de gestión global Kearny ha dado a conocer su informe más reciente sobre inversión extranjera para el año 2024, revelando los países más atractivos para las empresas a nivel mundial. Este análisis se fundamenta en el Índice de Confianza en la Inversión Extranjera Directa (IED) y en las opiniones de ejecutivos de empresas internacionales. Los criterios más significativos para evaluar a estos países incluyen la estabilidad política y económica, la implementación de políticas proempresariales, y el potencial de crecimiento del mercado.

En este sentido, la investigación de Kearny revela que un país de Sudamérica ha capturado la atención de inversores internacionales, por lo que supera expectativas y redefine la economía en la región. Sus buenos resultados han posicionado a esta nación entre los 20 más importantes del mundo, por lo que deja atrás a otros como México, Dinamarca o Corea del Sur.

El país más atractivo de América Latina para la inversión extranjera

Brasil se consolida como el destino predilecto para la inversión extranjera en América Latina, gracias a su dinámica economía, extenso mercado interno y sólidas políticas de incentivo al capital extranjero. El ranking de Kearny 2024 resalta esta nación por su ambiente de negocios favorable, que destaca en sectores como tecnología, energías renovables y agroindustria, los cuales ofrecen vastas oportunidades para inversores con visión de futuro.

Del ranking global, Brasil se posiciona en el puesto 19, además de consolidarse como la quinta mejor economía emergente. Es importante resaltar que este gigante sudamericano cuenta con una baja inflación, de 3,93%, la cifra más baja desde junio de 2023, de acuerdo con el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

Brasil se posiciona como uno de los mejores mercados para la inversión extranjera. Foto: Kearny

Brasil se posiciona como uno de los mejores mercados para la inversión extranjera. Foto: Kearny

Además, Brasil cuenta con el puerto de Santos o São Paulo, el cual se destaca por ser el más grande de Sudamérica. Esta terminal, integrada por Santos y DP World, tiene una extensión de 7,7 millones de metros cuadrados, se convierte en el corazón del comercio entre el subcontinente y Asia del Este. La terminal moviliza cerca de 4 millones 442.876 TEU, cifra que refleja su monumental capacidad operativa. Principalmente, maneja soya, carnes y vehículos aéreos.

El puerto de Colón es el principal de Latinoamérica. Foto: SELA

El puerto de Colón es el principal de Latinoamérica. Foto: SELA

¿Cómo se encuentra la inversión extranjera en otros países, como Argentina y Perú?

Mientras Argentina marca su retorno triunfal al índice de Kearny, gracias a un aumento del 125% en IED y políticas económicas reformistas; Perú mantiene su atractivo con una economía diversificada y estabilidad política. Ambos países evidencian el potencial sudamericano para atraer inversiones globales, ya que se adaptan a las tendencias de nearshoring, además de aprovechar sus recursos naturales y humanos para captar la atención de inversores internacionales.

¿Qué se necesita para que un país atraiga inversión extranjera, según Kearny 2024?

El Índice de Confianza en la Inversión Extranjera Directa destaca factores como la estabilidad política y económica, un marco regulatorio claro y políticas de incentivo al inversor como claves para atraer IED. La adaptación a las dinámicas globales y las estrategias específicas, como el nearshoring, pueden posicionar a un país como destino favorito para la inversión extranjera, lo que promueve el crecimiento económico y la creación de empleo.