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Condenan a cadena perpetua a Lucy Letby, la enfermera que asesinó a 7 bebés en Reino Unido

El juicio, trasmitido por la televisión británica, duró 10 meses. Como se recuerda, se detuvo a la mujer una primera vez en 2018 y luego en 2019. Finalmente, fue encarcelada en noviembre de 2020.

Lucy Letby, quien manifestó su inocencia, se negó a asistir a la audiencia final. Foto: composición de Álvaro Lozano/La República/AFP – Video: Infobae
Lucy Letby, quien manifestó su inocencia, se negó a asistir a la audiencia final. Foto: composición de Álvaro Lozano/La República/AFP – Video: Infobae

Un tribunal de Manchester Crown, en Reino Unido, condenó este lunes a cadena perpetua a Lucy Letby, la enfermera que mató a siete bebés en el país. Fue el juez James Goss quien leyó la sentencia contra la mujer, considerada la mayor asesina de recién nacidos en la historia británica. La sentencia fue transmitida en vivo por la televisión.

"Actuó de una manera totalmente contraria a los instintos humanos normales que son cuidar a los bebés y en violación flagrante con la confianza que todos los ciudadanos depositan en los profesionales de la salud", declaró Goss sobre esta pena muy poco frecuente en la legislación inglesa. Por la “gravedad excepcional” de los crímenes, “pasará el resto de sus días en la cárcel”, sentenció.

Como se recuerda, el último sábado 19 de agosto, Letby fue declarada culpable de inyectar insulina o aire en las venas de los bebés, así como de sobrealimentarlos de leche. En el caso de la británica también se incluyen otros seis intentos de homicidio en el hospital Countess of Chester.

La mujer, quien manifestó su inocencia, se negó a asistir a la audiencia final. Es “cobarde que quienes cometen crímenes tan horrendos no den la cara ante sus víctimas”, expresó el primer ministro británico, Rishi Sunak, al respecto.

Lucy Letby llegó a ser trasladada en junio de 2016 a un servicio administrativo. Dos años después, se le detuvo una primera vez en 2018, y luego en 2019. Finalmente, fue encarcelada en noviembre de 2020. El juicio duró 10 meses.