El obispo auxiliar de Los Ángeles es asesinado a balazos en su habitación
Inicialmente, consideraron el caso como “sospechoso”, pero luego la Policía determinó que se trataba de un homicidio. “Su legado seguirá vivo”, agregó en Twitter.
El último sábado 18, el obispo auxiliar David O'Connell fue asesinado a balazos en la habitación de su casa. Pese a que en un inicio el caso se investigó como “sospechoso”, según la Archidiócesis de Los Ángeles, en Estados Unidos, la Policía determinó este domingo que se trataba de un homicidio.
"Estamos profundamente conmocionados y entristecidos por esta noticia", indicó el arzobispo de Los Ángeles, José H. Gómez, en un comunicado.
Fue alrededor de las 13.00 (hora local) que el Departamento de Policía de la ciudad recibió una llamada de emergencia. Cuando los agentes policiales llegaron al lugar, encontraron el cuerpo del obispo O'Connell sin señales de vida, con una herida de bala en el torso, por lo que inmediatamente se confirmó su deceso.
Tras la lamentable noticia, la Policía de los Ángeles envió un mensaje a través de su cuenta de Twitter: "Su legado seguirá vivo".
Como se recuerda, O'Connell fue nombrado obispo auxiliar de la ciudad por el papa Francisco en 2015 y fue ordenado sacerdote para la arquidiócesis de Los Ángeles el 10 de junio de 1979. Ahí se encargaba de coordinar el apoyo de la iglesia a niños y familias de Centroamérica.
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El obispo trabajó como “pacificador” en las intervenciones contras las pandillas en el sur de California durante las últimas décadas. Esta labor fue reconocida por los feligreses. “Era un pacificador y tenía pasión por servir a los necesitados mientras mejoraba nuestra comunidad”, agregó el sheriff local Robert Luna por Twitter.
Por último, mediante la misma red social, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos también se pronunció sobre el deceso de O'Connell vía y deseó que el “obispo pacificador” descanse en paz.
