Mundo

Angela Merkel acepta que habrá que dialogar con los talibanes para salvar vidas en Afganistán

Por su lado, Vladimir Putin señaló que se debe aceptar la realidad que vive el territorio y prevenir la desintegración del Estado afgano.

La canciller alemana, Angela Merkel, de 66 años, afirmó que recibirá la vacuna de AstraZeneca cuando llegue su turno. Foto: AFP
La canciller alemana, Angela Merkel, de 66 años, afirmó que recibirá la vacuna de AstraZeneca cuando llegue su turno. Foto: AFP

Tras una reunión con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, Angela Merkel, canciller de Alemania, aceptó que se va a tener que dialogar con los talibanes para evitar pérdidas humanas en Afganistán.

Ahora habrá que dialogar con los talibanes (...) e intentar salvar a aquellos cuya vida está amenazada para que puedan abandonar el país”, dijo Merkel en una rueda de prensa conjunta en el Gran Palacio del Kremlin.

Merkel mostró su insatisfacción por la toma de poder de los talibanes en el país centroasiático y admitió que “recibieron más apoyo del que nos hubiera gustado”. Sin embargo, recalcó que ahora lo importante es ayudar a evacuar a quienes cooperaron con Alemania en los 20 años de operación de la OTAN.

Darles refugio en Alemania y sacar a cuantas más personas se pueda en los próximos días”, indicó.

La canciller recordó que la lucha contra el terrorismo y la operación aliada comenzó a causa del ataque a las Torres Gemelas en Estados Unidos. “La situación con el terrorismo en Afganistán ha empeorado desde entonces. Pero la comunidad internacional debe combatir el renacimiento del terrorismo en Afganistán”, apuntó.

Por su lado, Vladimir Putin señaló que se debe aceptar la realidad que vive Kabul y demás ciudades, pero también prevenir la desintegración del Estado afgano. “El movimiento talibán controla hoy prácticamente todo el territorio del país, incluido la capital. Esta es la realidad. Y, precisamente, debemos partir de ella sin permitir, sin lugar a duda, la desintegración del Estado afgano”, dijo.

Además, el mandatario ruso hizo una feroz crítica a la imposición de valores democráticos en distintos países, ignorando las tradiciones de estos pueblos.

“Ya vimos lo que pasó en el período conocido como Primavera Árabe, ahora en Afganistán. Todos nuestros socios deben convertir esta regla en universal: tratar con respeto a sus socios y armarse de paciencia si algo les gusta o no. Darles a los pueblos el derecho a decidir por ellos mismos su destino, independientemente de cuánto tiempo los lleve recorrer la senda de la democratización”, finalizó.