¿Cuál debe ser la salida para Cuba? Analistas responden
Dos especialistas dan sus impresiones a La República acerca de las acciones que se deben tomar para resolver la crisis en el país controlado por el Partido Comunista desde hace 60 años.
En los últimos días se están llevando protestas inéditas en Cuba contra la inacción del gobierno de Miguel Díaz-Canel ante la crisis humanitaria en dicho país, que lleva seis décadas bajo el mando del Partido Comunista, fundado por los hermanos Fidel y Raúl Castro.
Con varias protestas de opositores (y también de simpatizantes del oficialismo), el país caribeño vive una jornada sin precedentes que mantiene en el limbo a dicha nación, y donde muchos de sus habitantes gritan consignas a favor de la libertad y la democracia. Sin embargo, ¿Qué se debe hacer para atender las crecientes demandas de los cubanos?
El internacionalista Óscar Vidarte no cree que el Gobierno cubano esté dispuesto a hacer concesiones con tal de que levanten las sanciones económicas que datan de 1962. Observó que las primeras declaraciones de Díaz-Canel han sido muy duras, ya que ha exigido a sus correligionarios que salgan a marchar a la calle, al estilo de las contramarchas en Venezuela, con el objetivo de lidiar con los ‘contrarrevolucionarios’, supuestamente “pagados por Estados Unidos”.
“No veo, en el corto plazo, más aún en un régimen con seis décadas en el poder, que Diaz-Canel entre en un espacio de negociación. Es cierto que existen escenarios donde los Castro han sido pragmáticos, Obama dio algunos pasos, hay un margen pragmático en el que el régimen puede ceder, pero sin presiones en la calle de por medio. El régimen no cede en estas circunstancias” explica el especialista.
Vidarte piensa que la intervención de otras naciones en la solución del conflicto dependerá de cómo avance la crisis. “Hemos visto un Gobierno que ha reaccionado cortando el internet, las comunicaciones, restando libertades, aún no escala a dimensiones mayores”, remarcó. Sin embargo, piensa que esta situación no influirá en las próximas elecciones latinoamericanas. “Eso sucedía hace más de cinco décadas, maximizamos mucho la influencia de Cuba en la región. Sin embargo, va a ser importante el debate regional que se va a implementar”, puntualiza.
Por otro lado, el profesor de la Universidad de Chile, Gilberto Aranda, considera que la actual crisis humanitaria se debe a la combinación de la escasez y un racionamiento no eficaz de insumos y materias primas. “Si tu le sumas las noticias de los explosivos contagios por coronavirus, eso fue pólvora. El malestar se difumina y disemina. Ello provocó una reacción en cadena. Evidentemente, hay un bloqueo por parte de Estados Unidos, de 1962, de la ley de comercio con el enemigo, y al mismo tiempo las políticas de racionamiento del régimen no han dado resultados”, indicó el también internacionalista.
“En Cuba, con todas esas políticas de salud que tienen, han logrado tener cinco vacunas, pero la cuestión no es solo tener la vacuna, sino administrarla de manera oportuna, y en eso se ha demorado el Gobierno cubano. Hay un hartazgo con la política, que no solo se ve en Chile y Colombia, sino incluso en regímenes diferentes como el de Cuba” relató el docente chileno
Vidarte considera que, aparte de la pandemia, una razón clave de las protestas en Cuba es la falta de expectativas de la población, sobre todo la más joven. “Cuando llegó Díaz-Canel a la presidencia en 2018, muchos esperaron cambios. Hubo un cambio constitucional que parecía que haría que Cuba abra un poco su economía, pues en esta se da mayor espacio al mercado y a la actividad privada, (y) parece alejarse del comunismo para tomar un discurso más socialista. Sin embargo, han pasado ya tres años y esas transformaciones han sido muy leves, o no han tenido el impacto que probablemente el Gobierno quería”, comenta el catedrático de la PUCP.
Si en algo coinciden ambos especialistas es que Cuba debe tener una solución pacífica y dialogada a sus constantes problemas, como el autoritarismo y las denunciadas violaciones a los derechos humanos. “Yo creo que, en el peor escenario en Cuba, los países que están en las antípodas, como México y Brasil, deberían promover una salida negociada y no promover mayor violencia. Estoy convencido de que van a haber grupos y Gobiernos que van a azuzar la violencia para acabar con el régimen. El camino de la violencia genera muerte y destrucción”, opinó Vidarte.
“El tiempo de las intervenciones militares no sería muy bien recibido, Incluso, no me cabe duda de que el mundo de la izquierda no castrista y el liberalismo de centro terminarían rechazando ese tipo de intervenciones en América Latina. Yo creo que EE.UU., bajo Joe Biden, se lo pensaría dos veces, no lo veo inminente y para ello tendrían que suceder varios factores, aunque no lo descarto” estableció Aranda.