EE. UU. insiste en una investigación “transparente” sobre el origen del coronavirus
EE. UU. apuesta por una investigación en la que coopere el Gobierno chino. Además, negó que tenga “alguna evidencia circunstancial” sobre el supuesto origen en un laboratorio.
La vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki, aseguró el jueves 20 de mayo que era necesario que se realice una investigación “independiente y transparente” sobre los orígenes del coronavirus.
“Nuestra opinión sigue siendo que debe haber una investigación independiente y transparente [sobre los orígenes de la COVID-19], y eso debe suceder con la cooperación y con datos proporcionados por el Gobierno chino”, destacó Psaki.
La funcionaria estadounidense realizó las declaraciones sobre un nuevo informe que existe del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes y que ha sido obtenido por Fox News,
El documento detalla que existe “evidencia circunstancial significativa” de que el coronavirus se originó a partir de una filtración viral en el Instituto de Virología de Wuhan (China), y que el Gobierno de EE. UU. “pudo haber financiado o colaborado” con la investigación que condujo a la liberación del virus.
La portavoz de la Casa Banca se negó a responder sobre la tesis de que el Gobierno podría tener “alguna evidencia circunstancial” sobre el supuesto origen en un laboratorio.
“En primer lugar, le advierto que no debe refutar una negativa, lo que nunca es un enfoque responsable, en nuestra opinión, cuando se trata de llegar al fondo de las causas fundamentales de una pandemia. [...] No tenemos suficiente información en este momento para hacer una evaluación”, señaló Psaki.
Sin embargo, la vocera admite que desde que inició la pandemia, China no ha sido “transparente”.
“Ahora tienen la oportunidad [...] de ser transparentes, participar en una investigación internacional que pueda llevar a una conclusión acerca de los orígenes y brindar información a la que a nosotros —republicanos, demócratas, todos en este país— nos encantaría tener acceso”, indicó.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó un informe sobre los orígenes del SARS-CoV-2 a finales de marzo y contempla que su transmisión es de murciélagos hacia otro animal, y posteriormente a los humanos.
Asimismo, afirman que la fuga de un laboratorio es considerada “extremadamente improbable”.
Por su pate, China denunció en abril los intentos de EE. UU. y otros países de politizar la búsqueda del origen del virus.
“Insisten en politizar el tema del rastreo del origen, socavar y perturbar la cooperación entre China y la OMS, atacar y difamar a China y desafiar abiertamente la investigación científica e independiente de los expertos”, refutó el portavoz de la Cancillería de la nación asiática, Zhao Lijian.