Red de narcotraficantes quiso instalarse en frontera de Chile con Perú
Dos hombres provenientes de México ingresaron a Lima por avión y viajaron a Chile por tierra, en 2019, con el propósito de traficar cocaína y vender drogas de diseño. El caso toma relevancia ante el descubrimiento de nuevos asentamientos en esa zona del continente.
La Unidad de Investigación de Radio Bio Bio ofreció detalles del ingreso a Chile de personas ligadas a cárteles de la droga que operan en Guadalajara, México.
Los hombres, identificados como Luis Olaiz y Álvaro Ojeda, llegaron al país en calidad de turistas el 27 de junio de 2019 por el paso de Chacalluta, en la frontera con Perú.
Los sujetos se dirigieron a Iquique y armaron una plantación de marihuana indoor, traficaron cocaína, consiguieron armas e incluso buscaron vender drogas de diseño.
No obstante, la Fiscalía chilena logró mantenerlos infiltrados desde que arribaron y aseguraron que no tienen relación con ninguna organización de alto vuelo.
Las autoridades sospechaban de ellos luego de ver los resultados de una investigación que indicaba que miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Sinaloa se habían instalado en Lima y en ciertas regiones de Perú. El mismo escenario también se presentó en Bolivia.
Los sujetos llegaron al Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, que sirve a Lima, para posteriormente dirigirse a Santiago por bus. El 27 de junio de 2019 ingresa por el paso Chacalluta, en la frontera con Perú.
El Ministerio Público informó que el primero tenía 20 años y una temporada tras las rejas en el Joey Corley Detention Center, en el estado de Texas, Estados Unidos. El segundo superaba los 30 y obtuvo el pasaporte antes de viajar a Sudamérica.
La investigación arrojó que poco a poco los ciudadanos mexicanos comenzaron a comprar en las tiendas del giro weed en Santiago. Adquirieron semillas, maceteros, ampolletas que simulan el sol, tierra de hoja especial, vitaminas, filtros de carbón, extractores de aire e incluso un calendario que modela el ciclo de crecimiento de las plantas feminizadas.
Avanzaban con la plantación de marihuana de alta calidad. Además, tenían la alternativa de traficar cocaína desde Bolivia y vender pastillas de diseño.
A los hombres no se les permitió que siguieran con su plan de narcotráfico tras la captura de ambos. El informe destaca que se encuentran tras las rejas de manera preventiva desde setiembre de 2019 y esperan que se realice el juicio antes de fin de año.
Sin embargo, su caso cobra relevancia nuevamente luego de que el 10 de marzo pasado, las autoridades chilenas capturaron a dos operadores del Cártel de Sinaloa en el aeropuerto de Santiago. Señalan que se trata de parientes y miembros del grupo creado por del ‘Chapo’ Guzmán.