China: laboratorio experimenta con monos posible vacuna contra el coronavirus
Los mamíferos a quienes se les proporcionó dosis altas del fármaco resultaron de forma favorable, según los expertos. A otros les dieron menores proporciones y su resultado fue distinto.
Una potencial vacuna contra el coronavirus, que usa patógenos inertes que provocan la enfermedad, fue administrada a ocho macacos Rhesus, que posteriormente fueron contaminados artificialmente.
“Los cuatro monos que recibieron el fármaco en una dosis alta no tenían ningún rastro del virus en los pulmones siete días después de su contaminación”, según los resultados publicados por el gigante farmacéutico Sinovac Biotech.
Dentro del mismo estudio, a los mamíferos a los que se les proporcionó dosis menores de medicamento tenían mayor carga viral en el organismo, pero también lograban resistir ante la enfermedad.
Los expertos que llevan a cabo este estudio para encontrar una cura a la pandemia del coronavirus, que ya ha contaminado a más de 2.5 millones de personas en el mundo, esperan que los resultados sean validados por la comunidad científica.
Según EFE, la empresa Sinovac inició sus ensayos en humanos el 16 de abril. “Se trata de los primeros datos serios que veo sobre una vacuna experimental”, comentó en Twitter Florian Krammer, virólogo de la escuela Icahn de medicina de Nueva York.
Además de Sinovac, China aprobó otros dos ensayos de vacunas contra el coronavirus, uno en Hong Kong y otro en Wuhan, donde brotó el patógeno a finales del año pasado.
En Estados Unidos, el laboratorio Moderna anunció que estaba realizando un ensayo desde mediados de mayo. Ellos cuentan con el apoyo del gobierno de Donald Trump.
Grupos farmacéuticos y los laboratorios del mundo entero libran una carrera contrarreloj para desarrollar tratamientos y una vacunas eficaces contra la COVID-19, que ha matado a más de 190.000 personas en el mundo. Se estima que la posible vacuna tardará en producirse entre 12 y 18 meses.