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Cárcel de Valencia desabastecida pese a presentar dos casos de coronavirus

Dos autoridades han dado positivo en las pruebas del COVID-19, lo que ha generado la reunión entre sindicatos del sector para evitar el contagio de los reclusos.

La cárcel de Picassent alberga también a la población más peligrosa. (Foto: El País)
La cárcel de Picassent alberga también a la población más peligrosa. (Foto: El País)

Las autoridades de la cárcel de Picassent, en Valencia, han alertado que dos de sus miembros han dado positivo a las pruebas del coronavirus tras estar en contacto con dos personas infectadas, por lo que han solicitado el abastecimiento de medicinas e implementos, ya que no tienen mascarillas, termómetros sin contacto ni equipos de protección individual.

Este jueves se llevó a cabo una reunión de urgencia entre representantes de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarios y los sindicatos de las prisiones con el fin de tratar el tema y evaluar los procedimientos que ejecutarán para evitar la propagación del virus en las cárceles, según conoció ‘El Español’.

Además, tomarían medidas respecto a las personas que ingresan de los penales, debido a que uno de los contagios se dio a través de una visita. Una enfermera de Vitoria que estuvo en contacto con su padre, uno de los funcionarios de la prisión valenciana, dio positivo al COVID-19 en los últimos días.

Es así que los sindicatos ACAIP-UGT y CSIF instaron a la administración la convocatoria urgente de la comisión estatal de seguridad y salud laboral con el fin de estudiar las directrices que tomarán respecto a los trabajadores de las cárceles. De este modo habrá prevención y monitoreo para que los reclusos y el resto de trabajadores no contraigan el virus.

Uno de los sindicatos, el ACAIP-UGT, indicó que el Ministerio del Interior es la entidad responsable de gestionar las pruebas de diagnóstico de coronavirus a los trabajadores de centros penitenciarios para determinar su estado de salud.

Control de ingresos en cárceles por COVID-19

José Ramón López, presidente del sindicato mayoritarios de Instituciones Penitenciaras, recalcó la importancia de contar con un protocolo de prevención y contención de esta enfermedad. “Necesitamos evaluar de manera urgente a las personas que cada día entran y salen de los establecimientos penitenciarios”, señaló.

Dado que Picassent es la prisión más grande de España, lo que preocupa es que los presos sean contagiados. Incluso, Alberto Téllez, portavoz de ACAIP, explicó que deben tomarse medidas específicas: “No se pueden aplicar los mismos protocolos para la población en general que en el ámbito penitenciario, por las implicaciones en materia de seguridad que hay dentro de una prisión”.

Si es que llegara a ocurrir un contagio dentro de las prisiones, la situación en España cambiaría. “Ya no estaríamos hablando de un problema de salud pública –única y exclusivamente-, sino que estaríamos ante una crisis de seguridad pública”, detalló una fuente penitenciaria.