Adolescente termina en coma al consumir droga mezclado con veneno para ratas
El adolescente perdió el movimiento de su brazo izquierdo y la memoria de corto plazo producto del consumo del estupefaciente, por lo que actualmente acude a un centro para su rehabilitación.
Tomar una pastilla de éxtasis como diversión casi le cuesta la vida a un adolescente de 16 años quien asistió a un concierto con un grupo de amigos en Belfast, Irlanda.
El joven identificado con las iniciales O.H.C. tomó una píldora de la popular droga, sin conocer que estaba mezclada con un 78% de veneno para ratas.
A los pocos minutos de consumirla, el menor acudió a un puesto de paramédicos del lugar. A la brevedad fue trasladado de emergencia al hospital de la zona, luego de que el termómetro marcara 45 grados de temperatura.
Según las pericias médicas, la pastilla tenía alto contenido de veneno para roedores lo que provocó que el joven incremente su temperatura corporal por más de 39 horas a pesar de que los doctores le colocaban compresas de hielo para bajar la fiebre.
Cuando el adolescente comenzó a sentir estragos en su salud, la madre Grainne y su esposo Alan se encontraban en una reunión con amigos en Londres. A las pocas horas recibió una llamada informándoles que el chico estaba en reanimación en el Belfast Mater Hospital.
“Justo antes del primer baile, recibimos una llamada en el que nos decían que mi hijo estaba en emergencia”, señaló la madre de Irish Mirror.
"No pudimos tomar un vuelo a casa desde Londres hasta la mañana siguiente, así que estuve preocupada en el aeropuerto toda la noche mientras Alan paseaba por los pisos manteniéndose informado sobre la situación de nuestro hijo en el centro de salud. Mi mayor preocupación era que no volviéramos a tiempo”, señaló Grainne.
Cuando los padres llegaron al nosocomio, el muchacho habría sufrido una falla de múltiples órganos por lo que fue hasta el día 34 después del incidente que el menor abrió los ojos.
“Estaba conectado a tantas máquinas que eran las únicas cosas que lo mantenían con vida. No tenía nada. No tenía intestinos, ni riñones, ni hígado, ni pulmones, ni corazón ni cerebro. No había actividad. Fue nuestra peor pesadilla” señaló Alan.
El joven actualmente acude a rehabilitación debido que no puede utilizar su brazo izquierdo y ha sufrido la pérdida de la memoria temporal.
Grainne ahora está dedicada a visitar las escuelas para informar a los estudiantes de los riesgos de consumir drogas y evitar que más casos como el de su hijo se vuelvan a repetir en otros jóvenes, que quizá no corran con la misma suerte de Odi.