Kirchner, expresidenta de Argentina, compareció ante tribunal de Comodoro Py por delitos relacionados a corrupción durante su mandato. Se mostró incómoda, no soltó su celular y solo habló con su abogado. ,Tensión en Argentina. Había minimizado su primer juicio oral, lo calificó como “una cortina de humo” y lo hizo evidente en su rostro. La expresidenta argentina, Cristina Kirchner, compareció ante los tribunales de Comodoro Py este martes por el delito de corrupción junto a varios de sus exfuncionarios, y se mostró desafiante, irreverente y, por momentos, hasta furiosa. Durante las casi tres horas que duró la lectura de las acusaciones, Cristina Kirchner escuchó los alegatos, estuvo atenta a su teléfono celular y solo cruzó palabras con su abogado. PUEDES VER Cristina Kirchner comparece ante la Justicia de Argentina y denuncia "cortina de humo" Casi no dejó de mirar su teléfono celular y por momentos habló en voz baja con su defensa. Era la primera vez en mucho tiempo que se reencontraba con Lázaro Báez -preso hace tres años-, Julio De Vido y José López, entre otros. Pese a todo no se saludaron ni cruzaron miradas. Cristina Kirchner, que eligió un traje azul con una camisa blanca y una escarapela a tono con la semana de los festejos del 25 de mayo, está acusada de haber integrado una asociación ilícita que movió las palancas del Estado nacional para, de manera delictiva, favorecer al presunto testaferro de los Kirchner, Lázaro Báez, con al menos 52 obras públicas que le costaron más de $ 46 mil millones a las arcas públicas. A las 12:03 p.m., ingresaron los jueces del Tribunal Oral Federal 2 de Argentina, Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso. De esta manera, comenzaba formalmente el primer juicio oral y público por sospechas de corrupción a Cristina Kirchner. Lo único que se hizo en el juicio fue leer unas 90 páginas de las 584 que constituyen la acusación de los fiscales que investigaron el caso, Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques. Terminó la primera audiencia del juicio a Cristina Kirchner por corrupción https://t.co/7LDYvC4wF8 pic.twitter.com/Bik74lbWsA — TN - Todo Noticias (@todonoticias) 21 de mayo de 2019 Fue una lectura tediosa que generaba caras de aburrimiento entre los acusados, los abogados y el público. Cristina Kirchner estuvo toda la audiencia con un celular en la mano. Lo miraba y lo manipulaba. Al mismo tiempo hablaba con Beraldi, uno de sus abogados. Por momentos sonreían. A la 1.21 p.m., la expresidenta de Argentina levantó la mirada porque en ese momento comenzaron a leer la imputación dirigida a cada uno de los acusados. La primera en ser nombrada fue ella en su carácter de "jefe de una asociación ilícita". Eso indicaba también que se había alcanzado la lectura de la página 38 del extenso requerimiento de elevación a juicio. A las 3.00 p.m., tras dos horas y 45 minutos de lectura, el juez Gorini dispuso que la audiencia terminaba y continuaría el próximo lunes. Cristina Kirchner se levantó y fue la primera en salir de la sala de audiencias. En el hall la esperaba el público. "Gracias, gracias, gracias", les decía mientras saludaba y su custodia le abría paso. Salió del edificio, se subió al auto oficial que la trajo y se fue. A un costado, un grupo de militantes la alentaba. Kirchner no dijo una sola palabra, pero su parquedad viene acaparando la atención del mundo.