Emmanuel Macron, el presidente de Francia, anunció iniciativas sociales para poder superar la protesta social impulsada por los chalecos amarillos.,El presidente francés Emmanuel Macron hablará el lunes por televisión para anunciar medidas con las cuales intenta desactivar una crisis de casi medio año de protestas populares jalonadas con frecuentes desbordes violentos. Emmanuel Macron, de 41 años, hablará el lunes a las 20h00, el "prime time" de la televisión y hora habitual de la cena de los franceses, para presentar sus "proyectos prioritarios de acción", y las "primeras medidas concretas", indicó el domingo el Palacio del Elíseo. PUEDES VER Macron justifica movilización del ejército para frenar protestas de "chalecos amarillos" Los trascendidos hablan --entre otras iniciativas-- de rebajas en el impuesto a los ingresos para los sectores de clase media e incrementos en las pensiones más bajas. Estos anuncios, a los cuales seguirá una infrecuente conferencia de prensa el miércoles, constituyen lo que el jefe de Estado calificó ante sus allegados como el "lanzamiento de cambios profundos". La baja de impuestos sobre los ingresos y el retorno a la indexación por costo de vida para las pensiones más bajas constituyen medidas prioritarias desde el punto de vista de más del 80 por ciento de los franceses, de acuerdo con una encuesta de la firma Ifop. Las medidas que anunciará el presidente Emmanuel Macron son el corolario del llamado "Gran debate" en el cual durante semanas se recolectaron puntos de vista e iniciativas de medio millón de franceses, ora a través de Internet, ora mediante más de 10.000 reuniones públicas, algunas de las cuales con participación del presidente. El primer ministro Edouard Philippe prometió decisiones "poderosas y concretas" y "grandes proyectos" a largo plazo. Pero el líder del Senado, el derechista Gerard Larcher, advirtió el sábado que Macron "no tendrá una segunda oportunidad". Las protestas de los chalecos amarillos --llamadas así porque los participantes utilizaban los chalecos fluorescentes que deben llevar en sus vehículos los conductores de automóviles-- comenzaron en las zonas rurales y pequeñas ciudades de Francia debido a los impuestos sobre el combustible. Pero rápidamente las manifestaciones se extendieron a todo el país y sus temas abarcaron el conjunto de la política social y fiscal del gobierno de Macron, un centrista que llegó al poder en 2017 con una ambiciosa agenda reformista.