Director de la Tarumba. En medio de su temporada Ilusión, aconseja a los políticos a acercarse al arte. Y recomienda elegir bien a nuestras autoridades. ,Por: Cecilia Castillo S. ¿Se puede tener ilusión en tiempos de audios y corrupción? Definitivamente. Creo que ya nos han arrebatado muchas cosas, como los votos, ofreciendo una serie de mejoras en el país, con promesas que, finalmente, no cumplen. Como ciudadanos debemos seguir exigiendo y peleando por el derecho que tenemos a buenos gobernantes, autoridades, a gente honesta que se encargue de guiar el país. Y en medio de todos esos arrebatos que nos quitan los sueños, la ilusión, me parecía mucho ya quedarnos sin nada. En la medida que sigamos peleando por nuestros sueños, ilusionados por un Perú mejor, estoy seguro que la ciudadanía va conseguir limpiar esa camarilla de corruptos que, felizmente, no son la mayoría. Yo tengo fe en este país. PUEDES VER Morrisey: “El feminismo no ayuda, hace que se tomen represalias” ¿Qué clase de circo es la política peruana? No estoy de acuerdo con esa idea. La política peruana, tal como está ahora, es lo más alejado del circo. El circo es arte y el arte es verdad, honestidad, transparencia. El arte enaltece el espíritu y nos hace mejores personas. La política, actualmente, dista mucho de eso. Pienso más bien que los políticos peruanos deberían fijarse no solo en el circo, sino en las distintas artes. De ahí pueden recoger una serie de enseñanzas: la comunicación con el público, la tolerancia entre peruanos, la aceptación de que somos de distintas sangres. Que somos un país de mestizos, con una capacidad enorme para hacer cosas nobles que beneficien al grupo, a la sociedad, al colectivo. Si la política peruana se fijara más en el circo, supuestamente, podríamos alcanzar una auténtica democracia. En Perú el circo es una celebración a la independencia y la libertad. ¿Qué podemos celebrar en tiempos tan difíciles? Un pequeño grupo de corruptos en este momento, que tiene cierto poder en el país, no refleja lo que somos los peruanos en su mayoría. Tenemos muchos motivos para celebrar y podría mencionar uno de ellos: la solidaridad para enfrentar, por ejemplo, los desastres naturales. Y ahora me voy a sentir más orgulloso del Perú cuando en las próximas elecciones seamos un poco más cuidadosos y sepamos realmente a quién elegir, porque si nos dejamos llevar por la mayor cantidad de publicidad o porque nos causa simpatía ciertos gestos o bailes de algunos candidatos, vamos a estar condenados a repetir los errores del pasado y presente. Creo que el próximo gran motivo de orgullo como peruanos y como sociedad serán las elecciones que se vienen. Espero que no nos dejemos convencer, como decimos cotidianamente, por vendedores de cebo de culebra. ¿A qué atribuyes la mística lograda entre La Tarumba y el público? A que el público reconoce en los trabajos y en los artistas de La Tarumba gente honesta, verdadera y auténtica, que al igual que los espectadores, aman celebrar al Perú. No solo cuando aparece la bandera y recorre las graderías del circo, en uno de nuestros números, sino cuando de pronto podemos ver a un danzante de tijeras sobre un caballo haciendo acrobacias sin traicionar la esencia de la danza. Cuando de repente ves en Ilusión a un niño con toda la pureza infantil, soñando con ser algo en la vida. Y en el espectáculo, justamente, motivamos no solo a nuestro personaje sino a todos los niños que asisten, a que crean en sus sueños y que confíen en los adultos quienes haremos realidad sus sueños.❧ TEMPORADA. Hasta el 23 de setiembre en el Centro Comercial Plaza Lima Sur – Chorrillos. Entradas en Teleticket y en la misma boletería de la carpa.