Moquegua: Southern restablece agua y operaciones en mina Cuajone
Actividades vuelven a la normalidad luego de casi 2 meses de conflicto social con la comunidad campesina de Tumilaca-Pocata-Coscore-Tala. Mesa de diálogo aún está pendiente.
Luego de casi dos meses de conflicto social con la comunidad campesina de Tumilaca-Pocata-Coscore-Tala, Southern Perú retomó sus operaciones cupríferas en la mina Cuajone, ubicada en el distrito de Torata, provincia de Mariscal Nieto, región Moquegua. La mañana del sábado 23 de abril, los trabajadores pusieron en marcha todos los sistemas de las chancadoras, fajas transportadoras, molinos, celdas de flotación, espesadores de concentrados, filtros, entre otros. También reinició el envío de concentrado de cobre al puerto de Ilo para los procesos pertinentes en Fundición y Refinería.
Asimismo, logró la reanudación del servicio de agua para el campamento minero, hospital y tres colegios del lugar. Según informó la empresa, mediante un comunicado, se van normalizando de manera progresiva las actividades de los centros poblados de Villa Cuajone y Villa Botiflaca.
Sin embargo, las labores de reparación para los daños ocasionados en el reservorio de Viña Blanca aún no culminan. Por ejemplo, el forado en un muro de concreto genera una fuga de 46 litros por segundo de agua. En un inicio se estimaban pérdidas entre 15 a 20 litros.
“Lamentamos que la población en nuestro campamento minero haya sido la más afectada por esta medida de fuerza. Invocamos a las autoridades a realizar los esfuerzos pertinentes para que situaciones como estas no se repitan”, sostuvo Raúl Jacob, vicepresidente de Finanzas de Southern Perú.
Conflicto
La comunidad campesina acusa a Southern de usurpar sus tierras hace más de 50 años. En ese sentido, le pidió una compensación económica y una participación en sus utilidades anuales. No obstante, la empresa minera alega tener los permisos. Al no llegar a un acuerdo, los comuneros decidieron tomar el reservorio de Viña Blanca, que alimenta con agua a 5.000 personas del campamento, hospital y colegios de Cuajone. También, bloquearon la línea férrea por la que se trasladaba el cobre. Por ello, paralizó sus operaciones mineras.
La PCM intentó llegar a acuerdos entre ambas partes, pero el escenario se complicaba cada vez más, incluso habían advertencias de enfrentamientos para recuperar el recurso hídrico. A fin de evitar actos violentos, se aprobó la declaratoria del estado de emergencia en Mariscal Nieto.
Luego de ello, los comuneros levantaron sus medidas de fuerza, entregaron el reservorio y firmaron un acta de acuerdos para una mesa de diálogo que solucione el problema. Esta última aún está pendiente.